Robert Steven Niño Silva, un colombiano radicado en Estados Unidos, regresó al país para casarse con su novia, pero fue asesinado en Bucaramanga por el amante de su pareja.
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El crimen del hombre de 32 años fue ordenado, al parecer, por Óscar Camargo, alias Pichi, quien sería el amante de la mujer y además está recluido en una cárcel del país, en donde habría organizado el asesinato.
Según testigos, Niño Silva llegó al barrio San Rafael donde reside su novia, y luego de conversar con ella por unos minutos fue abordado por unos sujetos en motocicleta. El parrillero le disparó hasta dejarlo tendido en el suelo.
De acuerdo a las autoridades, la principal hipótesis es que Camargo dio la orden del crimen “por un problema pasional”. Este recluso tendría una relación sentimental con la mujer, ya que ella incluso habría ido a visitarlo a la cárcel en diferentes oportunidades.
Según el diario local Vanguardia Liberal, ‘Pichi’, conocido como el ‘Pablo Escobar de Bucaramanga’ amenazó a la joven haciéndole jurar que no estaría con ningún otro hombre, indicándole que ningún pretendiente se le podía acercar.
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Sin embargo, la mujer habría continuado, paralelamente, una relación con Robert Steven, quien se había radicado recientemente en el país norteamericano, pero decidió volver a Bucaramanga por amor; escapar con su novia y casarse en el exterior.
Los informantes de ‘Pichi’ le habrían notificado el regreso del joven y los planes que tenía, por lo que habría procedido a mandarlo a matar de inmediato.
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De acuerdo a familiares de la víctima, Niño había hablado por teléfono minutos antes de salir de su casa, alrededor de las 7:56 p.m., y dirigirse hacia donde la mujer el pasado domingo 2 de marzo, sin embargo no saben con quién fue la comunicación.
Funcionarios de la Sijín encontraron en las pertenencias de Robert dos celulares, que serán piezas claves para investigar los móviles del crimen.
