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Luego de que la Corte Constitucional abriera un incidente de desacato en contra del ministro de Salud Guillermo Jaramillo por cuenta de los presupuestos máximos, esta entidad expidió la Resolución 067, que se refiere a la regulación y gestión del presupuesto destinado a servicios y tecnologías en salud no financiados con recursos de la Unidad de Pago por Capacitación (UPC), es decir los presupuestos máximos.

La entidad señaló que con esta normativa, además de dar cumplimiento con la orden de la Corte, permitirá que el Ministerio de Salud y la ADRES “cuenten con información fidedigna, verificada y auditada para la fijación del presupuesto máximo anual, garantizando no sólo la suficiencia sino la transparencia de los recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud”.

Según se lee en la resolución, se creó una metodología para la definición y reajuste de los presupuestos máximos. Así las cosas, tras la normativa se adoptará una metodología unificada para calcular el presupuesto máximo. Esta medida, según el documento, “debe considerar datos históricos, el comportamiento de enfermedades, evaluaciones técnicas y registros en herramientas tecnológicas como Mipres”.

De acuerdo con el documento del Ministerio de Salud, con el cambio de la metodología se busca que los recursos asignados a las Entidades Promotoras de Salud (EPS) y Entidades Adaptadas (EA) se gestionen con base en información confiable y actualizada. Esto porque el presupuesto máximo incluye mecanismos para ajustes y redistribuciones según eventos o situaciones como traslados de afiliados, cambios en el perfil epidemiológico y avances en tecnologías de salud.

Por otro lado, la administradora de recursos del sistema de salud (ADRES) será garante de control y transparencia porque realizará una auditoría y análisis de la información reportada por las EPS para garantizar que los recursos del presupuesto máximo sean utilizados de manera eficiente y conforme a las normas.

La resolución también destaca que el presupuesto máximo incluye una “amplia gama” de servicios y tecnologías que benefician a los pacientes, como medicamentos innovadores y tratamientos para enfermedades huérfanas.