Dos estudios publicados este lunes, han dado a conocer un nuevo descubrimiento que sugiere que los futuros viajes a la Luna contarán con la gran ventaja de poder obtener el agua in situ, pues además de confirmar su presencia en nuestro satélite revelan que su suelo conserva cantidades mayores de lo que se creía hasta ahora.
La NASA convocó una rueda de prensa para comentar estos hallazgos que seguramente facilitarán la preparación del programa Artemis (Artemisa, en español) con el que EEUU pretende volver a la Luna en 2024 y establecer en los años siguientes una estación lunar.
Desde antes se sabía que el polo sur de nuestro satélite alberga agua que en teoría, podría ser extraída por los astronautas que vayan a trabajar allí dentro de unos años -los tripulantes de las misiones Apolo pasaron muy poco tiempo y llevaron todo lo que necesitaban en sus naves.