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El país no sale del asombro y la consternación que le produjo la masacre de la familia Lora Rincón, cuyos mayores eran los pastores evangélicos de una iglesia en Aguachica.

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En las últimas horas la Confederación Evangélica de Colombia se pronunció sobre este caso que han calificado de atroz, que lamentan muchísimo y que la han sufrido como cristianos y pueblo de Dios, al igual que la sociedad en general.

Lidia Arias, presidenta de la Confederación, indicó que han estado mirando de cerca todo lo sucedido, a través de la Asociación de Pastores de Aguachica y Valledupar, teniendo reuniones con la Procuraduría para poder establecer acciones en favor de ayudar a las iglesias que están afiliadas en este departamento.

Ello porque tienen conocimiento que hay familias y líderes religiosos que están muy afectados, incluso hay un pastor que ha estado hospitalizado por nervios, y otro tipo de informaciones que no están confirmadas.

“Estamos viendo cuántas iglesias hay en Aguachica para ver en qué podemos ayudar”, dijo Arias.

Igualmente sostuvo que son una organización incluyente para trabajar por los Derechos Humanos, por el respeto y la unidad. Enfatizó que las denuncias más recibidas son en el Cauca y Pasto, con casos de persecución religiosa por diversos motivos, unos han sido secuestrados y muchos han tenido que salir de la región donde están haciendo sus trabajos.

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“Tenemos cifras en una revista que publicamos, que en el año 2023, tuvimos 177 casos de secuestro, persecución, asalto, violencia incluso a damas y niños. Lamentablemente muchas personas no denuncian entonces por esto de alguna manera no podemos tomar acciones frente a las amenazas. Estamos trabajando mancomunadamente con la Procuraduría, el Ministerio del Interior, la Dirección de Asuntos Religiosos, y hubo respuesta del Presidente frente a este caso para establecer unas rutas claras para que cuando haya violencia se pueda acceder a líneas fáciles de comunicación y denuncia y ser ayudados”, puntualizó Lidia Arias.