Compartir:

Indígenas arhuacos bajaron desde el corazón de la Sierra Nevada hasta Valledupar para rendirle un homenaje, en su tumba, a Diomedes Díaz, ‘El Cacique de La Junta’, al conmemorarse este miércoles ocho años de su fallecimiento.

Con la indumentaria propia de su etnia y acordeones en el pecho, los 'hermanos mayores' llegaron al cementerio Jardines del Ecce-Homo, para sumarse a la romería de fanáticos que se dio cita en el campo santo a recordar con sus cantos al ídolo musical.

Geovanny Robles, proveniente del asentamiento Yerwa, arriba de Pueblo Bello, dijo que por más de cinco horas caminaron hasta la ciudad para acompañar en su última morada al artista, del que se declaró la comisión indígena, seguidora de Diomedes.