Un duro cuestionamiento lanzó la Personería de Valledupar por el uso y disfrute al que es sometido el río Guatapurí, concretamente en la zona urbana de la capital del Cesar.
Esa agencia del Ministerio Público emitió una denuncia en la que pone de presente que 'se percibe el aprovechamiento hídrico, afectaciones ambientales y la desviación del río Guatapurí de manera ilegal'.
A partir de esto, la misma Personería trasladó un oficio a la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, 'para que realice una inspección ocular urgente e inicie las investigaciones respectivas para determinar responsabilidades en este desvío de cauce'.
Silvio Cuello Chinchilla, personero de Valledupar, comisionó una verificación sobre estos hechos y al cabo de una visita a terreno calificó la situación como 'gravísima', señalando que 'es nuestro afluente principal, el río Guatapurí es de todos y no de unos pocos, por eso instamos de forma vehemente y respetuosa a la autoridad ambiental departamental, como lo es Corpocesar; también a la Procuraduría Regional y a todos los entes responsables'.
Esta denuncia está apoyada por un seguimiento hecho por el líder ciudadano Alfonso Luis Martínez Fuentes, quien fue el primero en advertir con su ejercicio de veeduría los desvíos con piedras y motobombas, así como la ubicación de una ‘playa’ alterna para cobrar a quienes acuden allí.
'Vemos el brazo donde se ve el agua que se están robando; también vemos motobomba y playas privadas, para llegar allá toca pagar. Construcción, sin permiso debería venir la oficina de Planeación a verificar. Observamos, además, pañales, botellas, basuras, este es el panorama del río Guatapurí después de un fin de semana, no lo cuidamos', dice Martínez Fuentes.
Otra de las observaciones que lanzó la Personería de Valledupar es que 'los bañistas no cumplen con las medidas de bioseguridad y que se expende licor sin ningún control', por lo que se requirió sobre el tema a la Policía Cesar.
