Treinta años después de su secuestro, el ganadero Roberto Lacouture recibió con un abrazo en su casa en Valledupar al excomandante del frente 41 de las Farc, Solís Almeida, quien lo mantuvo en cautiverio durante 80 días en la serranía del Perijá.
El encuentro se dio, al cumplirse este domingo tres décadas de aquel suceso, que se convirtió en el primer secuestro cometido por este frente en el departamento del Cesar. Ocurrió el 6 de octubre de 1989 en una finca propiedad de Lacouture en el municipio de Becerril.
Ya la ONU había logrado el acercamiento entre los dos personajes, en un camino no tan fácil, y tras un año de conversaciones, en enero pasado el ganadero accedió a llegar al Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación Tierra Grata, donde se concentran unos 150 excombatientes de las Farc; allí Abelardo Caicedo, nombre de pila del exjefe guerrillero, le pidió perdón.
Desde entonces han seguido hablando, incluso participando en un proyecto juntos para la reincorporación de los desmovilizados, como ejemplo de reconciliación.