Compartir:

Hasta ahora la investigación por la muerte de 16 bebés prematuros, de 24 atendidos en la Clínica Laura Daniela de Valledupar y que recibieron el medicamento Survanta, se centra en la adulteración del fármaco

'Se está investigando usurpación de derecho de propiedad industrial y derechos obtentores de variedades vegetales, corrupción de alimentos, productos médicos o materiales profilácticos', dijo la directora seccional de Fiscalías en el Cesar, María Estela Aguilar

Sin embargo, la Fiscalía no descarta que sea un caso de homicidio. 'Por ahora no se investiga, hasta que no se establezca, pero no quiere decir que no se vaya a investigar', agregó la funcionaria.

Sostuvo que en este caso todos los participantes son objeto de investigación, desde el laboratorio que produce el medicamento y las personas que lo comercializan hasta las clínicas que han adquirido este producto.

'Estamos trabajando, recolectando elementos materiales de prueba y evidencias físicas con el fin de llevar a cabo una buena investigación y judicialización', precisó la funcionaria. 'Los investigados son todos, porque tenemos que establecer dónde se alteró o falsificó el medicamento, y qué sucedió exactamente', puntualizó.

Manifestó que tienen que contar con todo el apoyo científico en la recolección de pruebas, considerando que es de esa forma como se puede determinar cómo fue esa alteración y qué fue lo que pasó realmente.

En enero pasado, cuando la Fiscalía hizo los allanamientos tanto en la clínica Laura Daniela, como en los establecimientos que comercializaron el medicamento, no se produjeron capturas. Ante esto la directora de Fiscalías del Cesar señaló que 'no se pudo producir capturas porque no sabíamos el estado del producto, no sabíamos si realmente es allí donde se produce, no habíamos establecido qué contenía, si era un producto que realmente viene de un laboratorio estadounidense, de Chicago, si había sido alterado, qué tipo de alteración, porque debemos ser muy precisos en la investigación para poder imputar cargos'.

'Se requiere la precisión del producto, cómo está, qué fue lo que pasó, qué clase de alteración tiene, y en segundo lugar de quién era el control exacto para poderlo distribuir y comercializar en los centros hospitalarios o médicos donde fue aplicado', afirmó.

La funcionaria señaló que aunque la secretaria de Salud del Cesar, Carmen Sofía Daza, puede tener dentro de sus funciones el control de las clínicas y hospitales, hasta ahora no han habido elementos por los cuales se le puede atribuir una conducta de tipo doloso.

Entre junio de 2016 y enero de este año se produjo en la clínica Laura Daniela el fallecimiento de 16 bebés prematuros a los que se les habían aplicado el medicamento Survanta, aparentemente falsificado. El compuesto sirve para tratar la inmadurez pulmonar en infantes. No obstante, de acuerdo con la secretaria Daza, estos pequeños también padecían otras patologías de base, por lo que se está a la espera de los resultados de la investigación para establecer si estas muertes están o no relacionadas con el suministro del mismo.