Por recomendación de las autoridades de salud, fue suspendida la remisión de más reclusos a la estación Permanente de Policía en Valledupar, tras la alerta que existe frente a un posible brote de meningitis, que ya habría cobrado la vida de uno de los internos que estuvo detenido en ese lugar. Igualmente se restringió el ingreso de visitas a este centro de reclusión.
De acuerdo con las secretarías de Salud del Cesar y Valledupar, más de 800 personas, entre internos, funcionarios del Inpec y custodios, de han sido atendidos y recibido tratamiento, dentro de las acciones preventivas para evitar un contagio masivo. 248 detenidos fueron valorados en la estación de Policía, ubicada en el centro de esta capital; y 553 en la cárcel judicial, en el barrio Dangond.
Igualmente se ofrecieron charlas de orientación a los reclusos y personal de seguridad, sobre los signos y síntomas de la enfermedad para captación oportuna de nuevos casos.
Además se mantendrá una vigilancia diaria para detección de casos compatibles en la Permanente Central de Policía y en la Cárcel Judicial, por parte de profesionales de salud del Hospital Eduardo Arredondo.
La suspensión del ingreso de más internos y de las visitas se mantendrá hasta este 17 de agosto, fecha que está sujeta a la aparición de nuevos casos que extendería el tiempo de aislamiento.
El plan de contingencia se activó, luego de la muerte del recluso Ángel Pérez De Aguas, ocurrida la noche del pasado martes 8 de agosto, luego que empezara a sentir los síntomas de la enfermedad durante los 10 días que estuvo detenido en la Permanente Central de Policía de Valledupar.
Medicina Legal seccional Valledupar le notificó a la secretaría de Salud municipal que al practicarle la necropsia al cuerpo de Ángel Pérez, detectó que las causas de su fallecimiento eran compatibles con meningitis.
