Es preocupante, recurrente y una constante la abstención electoral en los diferentes comicios que se celebran periódicamente en el país.
Fenómeno que los colombianos venimos soslayando y que una vez más se presentó en el plebiscito que recientemente se celebró, que de un potencial de 34.889.945 de colombianos habilitados para votar, solo lo hicieron 13.066.047, es decir que el 69% de los colombianos se abstuvo de votar, no obstante que el plebiscito era consulta trascendental para el futuro del país. Esta situación es tan alarmante que la OEA, después de los resultados del plebiscito, les recomendó a los colombianos adoptar medidas para “incrementar el derecho al sufragio”.
Con este panorama hay que preguntarse qué es lo que lleva a los colombianos a asumir esta conducta apática e indiferente en los procesos electorales que se celebran en nuestro entorno.
Algunas voces afirman que la abstención está relacionada con que el voto no es obligatorio y que aunque existen beneficios legales, muchas personas piensan que su participación no cambia el curso del país, que a la gente no les seducen las propuestas que presentan los diferentes candidatos a corporaciones públicas y a jefaturas del Estado, que es creciente la desconfianza de los ciudadanos hacia los intermediarios políticos de los partidos tradicionales.
Por eso en presencia de estos factores se puede decir que el ciudadano colombiano se abstiene de votar como una forma de protestar, de sentar su inconformidad ante el ambiente de corrupción y de irregularidades que existe en el espectro político.
Valmiro De La Hoz Cantillo
Árbitro argentino: Pitana no pita ná…
El árbitro del partido Colombia-Uruguay, el argentino Néstor Pitana, es un gran amigo de la permisividad y por ende poco motivado a aplicar el reglamento en jugadas controversiales. Faltas notorias que otro árbitro sancionaría inmediatamente son pasadas por alto por el argentino, con una complacencia que asombra. Una mano indiscutible de Godín y una falta en el área de Uruguay contra Cuadrado son dos ejemplos fehacientes de la tranquilidad de Pitana, quien se las tiró de loco y salió corriendo para otro lado. Su lema es “dejar jugar y no convertir el partido en un concierto de pito”, pero todo tiene un límite, y las faltas y las tarjetas hay que aplicarlas cuando es necesario. Si bien el resultado no puede achacársele al árbitro, sino a los descuidos y falta de coordinación de la defensa colombiana, no es menos cierto que la autoridad del árbitro aplicada correctamente hubiera desfavorecido a los uruguayos.
Bueno, ya no es hora de lamentos, sino de prepararse a conciencia para enfrentar al bicampeón de América, que nunca ha sido presa fácil y nos pisa los talones en la tabla de puntuación de las eliminatorias mundialistas. No estará Cuadrado, pero confiamos que esté James y que el buen técnico José Pékerman no olvide que cuando juega Macnelly Torres adelante deben estar siempre goleadores netos como Bacca o Teófilo, para recibir sus pases realizados con precisión cirujana.
Ojalá y nos toque otro árbitro, porque definitivamente Pitana es un árbitro, que no pita ná…
Samuel Muñoz Muñoz
samuz@hotmail.es
FE DE ERRATA
EL HERALDO se permite aclarar que por un error involuntario en la edición que circuló el 18 de octubre, en la sección de Tendencias se publicó una nota que señalaba que la fabricante de tecnología surcoreana Samsung iba a descontinuar la producción de su línea Galaxy Note, los equipos phablet, de línea premium, de la empresa para centrarse únicamente en los Galaxy S; sin embargo, aclaramos que la empresa solo dejará de producir el teléfono Galaxy Note 7, debido a los problemas que ha presentado, y no tiene la intención de descontinuar toda la línea Note.
