'Es posible que estuvieran esperándolo, porque él usaba esa vía todos los días para ir a ayudar a un hermano en el corregimiento de Rocha, Bolívar, que vende fritos', manifestó uno de los familiares del hombre que fue asesinado de tres disparos para quitarle la motocicleta.
El hecho se registró la noche del domingo cerca de la finca conocida como Altamira.
Como era costumbre, Silfredo Enrique Gaviria Audivet, de 50 años, había ido al corregimiento de Rocha, para ayudar a un hermano en una motocicleta de su sobrino, la cual es nueva.
El vehículo se lo habían prestado 'para que la despegara', razón por la cual estaba manejándolo.
A las 6 de la tarde, Gaviria y su compañera salieron de Rocha y cogieron la vía de siempre, la cual según la mujer, se encontraba sola y algo oscura, pues eran casi las 7 de la noche.
De un momento a otro salió una motocicleta con dos hombres desconocidos que estaban vestidos de negro hasta las manos, y que solo se le veían los ojos. 'Yo cuando los vi le dije: ‘Morocho’, viene una moto sospechosa con dos tipos que salieron de la nada porque esto estaba solo'.
La noticia, al parecer, dejó helado y nervioso a Gaviria.
Los sospechosos al darles alcance, les gritaron que se detuvieran y cuando Silfredo intentó hacerlo, el conductor de la otra moto sacó un arma de fuego y le propinó tres tiros: uno en el brazo izquierdo y dos más en el pecho, que provocaron que tanto él como su pareja cayeran al suelo.
'El tipo le dijo al cómplice que cogiera la moto de rapidez', manifestó la mujer.
Una vez se fueron, la compañera de la víctima salió corriendo y pidió ayuda en medio de los gritos para que auxiliaran a su pareja.
Gaviria fue transportado hasta el hospital de Arjona, pero los médicos manifestaron que había llegado sin signos vitales.
Según algunos de los vecinos del lugar hasta donde llegó la mujer a pedir ayuda, habrían visto a los sospechosos merodeando la vía en la que ocurrieron los hechos.
Las autoridades manifestaron que están investigando el hecho y revisan cámaras que hay en la vía para capturar a los implicados.