Tras la realización de la primera socialización que hizo la concesionaria Ruta Caribe y la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) con la comunidad de Arroyo de Piedra, los líderes del corregimiento optaron por bloquear la vía de la Cordialidad, lo que ha provocado un trancón de más de un kilómetro.
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La concesionaria les ofreció un espacio para explicarles el proyecto y los argumentos técnicos que se tuvieron en cuenta para la instalación del peaje, lo mismo que los beneficios que traería para el municipio de Luruaco.
En ese sentido, la concesionaria habló que con el proyecto de infraestructura vial y la instalación de la caseta de cobro se estarían generando unos 4.000 empleos.
No obstante, los miembros del comité No Más Peaje continúan estando en desacuerdo con la implementación del nuevo cobro. Y, como resultado, obstaculizaron ambos tramos de vía, atravesando varias mulas y volquetas de sus residentes, lo mismo que ramas y otro tipo de vehículos más pequeños.
Luego de conocer que la comunidad se rehúsa a aceptar el peaje, los funcionarios que asistieron notificaron que los argumentos expuestos por la gente se llevarán a las oficinas de la ANI, pero la planeación del peaje sigue en pie hasta que se llegue a un acuerdo.
De esa forma, los manifestantes anunciaron que seguirán protestando en contra del peaje. Incluso, indicaron que están dispuestos a seguir el paro hasta que la Agencia Nacional de Infraestructura anuncie que esta caseta no va definitivamente.
Emerson Manotas, miembro de la comunidad de Luruaco, argumentó que “a pesar de que la ANI ha tenido la oportunidad y la hemos escuchado con mucho respeto, nosotros tenemos bien claro que la instalación de la caseta perjudica a Luruaco y a los municipios aledaños”.
Asimismo, aseguró que afecta a Arroyo de Piedra de manera directa porque sus habitantes viven de la microeconomía.
“Por ejemplo, en el corregimiento donde se va a instalar la caseta de peaje, la gente vive del trabajo de las minas, el 90 % de las personas. Nosotros somos agropecuarios, pequeños productores. Los pasajes se incrementarían al instalar una nueva caseta de peaje. Nosotros para ir de Luruaco a Barranquilla tendríamos que pagar dos peajes en menos de 50 kilómetros, que es algo totalmente inconcebible para una gente con una economía totalmente precaria”, explicó el dirigente.
En estos momentos, los manifestantes solo están dejando pasar algunas ambulancias. El tramo de mayor congestionamiento es la salida del corregimiento, pues aquí están concentrados todos los manifestantes que salieron molestos de la socialización.
