Un diagnóstico poco alentador fue el que entregaron los expertos del sector eléctrico que participaron este martes en el Foro Enercaribe 2025 organizado por la Asociación Colombiana de Ingenieros (Aciem) en Barranquilla.
Carlos Cárdenas, presidente de la Asociación Colombiana de Ingenieros (Aciem), fue enfático al sostener que la situación eléctrica del Caribe colombiano está “sobrediagnosticada”.
Dijo que ya existe un diagnóstico claro, consistente en que la región enfrenta fluctuaciones de tensión y una mala calidad en el servicio eléctrico, lo que afecta la competitividad al punto de que algunas empresas industriales están evaluando salir de la zona.
Ante este panorama, señaló que el sistema se mantiene en alerta desde hace dos o tres años debido a la deficiencia en los recursos energéticos.
Mencionó, además, que la demanda está creciendo más rápido que los nuevos proyectos de generación y las obras de infraestructura, mientras que el déficit de gas tendrá un impacto directo en las tarifas.
“Es una suma de factores que debemos enfrentar. Ese riesgo estará latente. Tendremos mayor claridad hacia 2030 o 2031”, afirmó Cárdenas.
Aclaró que su intención no es generar pánico, sino advertir la realidad del sector. Para él, el primer paso para disminuir el riesgo de un apagón es el ahorro energético.
También describió la precaria situación en que se encuentran las redes de distribución. “Hoy tenemos redes agotadas, líneas de media y baja tensión subdimensionadas, transformadores envejecidos y subestaciones que se convierten en cuellos de botella”.
Para Cárdenas la electricidad no es un asunto técnico aislado: es seguridad energética, competitividad empresarial y dignidad para los hogares. “Si el Caribe tiene malas redes, compite peor, produce menos y pierde inversión. Si el Caribe mejora sus redes, gana la región y gana Colombia”, resaltó
Panorama de las empresas
En el evento, que reunió a representantes de todo el sector, intervinieron también los directivos de las empresas comercializadoras del Caribe, Air-e y Afinia, quienes expusieron los avances y desafíos que han debido enfrentar para mantener a flote la prestación del servicio en la región.
El gerente de Afinia, Ricardo Arango, afirmó que estos dos operadores de red han logrado avances muy significativos en la calidad del servicio.
“En el caso de Afinia, los indicadores Said y Saifi han mejorado en un 70 %. Pasamos de 123 interrupciones en diciembre de 2019 a 51 para este año. Es un avance notable y demuestra que todos enfrentamos condiciones similares en la región”, explicó.

En ese sentido, Arango expuso que el Caribe debe analizarse desde diversas perspectivas. La primera corresponde a su enorme potencial, “que es una de las razones por las que seguimos aquí. A pesar de eso, si EPM —propietario de Afinia— decidiera retirarse, el sector eléctrico entraría en un riesgo sistémico”.
Mencionó que esta comercializadora sostiene buena parte del equilibrio del sistema colombiano gracias a los pagos que realiza a los generadores, que fluctúan entre $350 y $400 mil millones mensuales.
Por su parte, Ramiro Castilla, director Comercial de Air-e, explicó que el propósito de la empresa ha sido democratizar el servicio, garantizar la transparencia en todos los procesos y seguir desarrollando acciones que aseguren una adecuada prestación del servicio.
Señaló que han trabajado a través de todas sus líneas operativas y, además, han buscado integrar a todos los actores de la cadena eléctrica.
Dijo que, para superar la crisis del sector, se requiere una solución integral y simultánea a un problema estructural “sobrediagnosticado”.
A esto se suman otros factores como la falta de responsabilidad de quienes deben cancelar el servicio en el sector oficial o la ausencia de control frente al crecimiento de invasiones que se conectan sin autorización.

Desde el Gobierno
La viceministra de Minas y Energía, Karen Schutt, resaltó las bondades del programa Colombia Solar, que contempla 25.300 proyectos solares.
Dijo que en su primera etapa está focalizado principalmente en la región Caribe, y contará con una segunda etapa por otros 4 billones de pesos para extenderse al interior del país.
“En este programa, Gecelca tendrá un rol fundamental como aliado en el contrato interadministrativo con el Ministerio de Minas y Energía para ejecutar toda la estrategia”, recalcó la funcionaria.





















