El alcalde de Puerto Colombia, Plinio Cedeño, envió un fuerte mensaje en medio de la sesión de la Comisión de Ordenamiento Territorial del Senado sobre el diferendo limítrofe con Barranquilla.
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De acuerdo con el mandatario local, “no existe disputa, sino una agresión por parte de un ente territorial de mayor dimensión política que pretende usurpar zonas geográficas”.
En su explicación, Cedeño indicó que estos terrenos “ahora son rentables desde la perspectiva fiscal y le parecen interesantes exclusivamente para aumentar su recaudo”.
En ese sentido, el mandatario de los porteños expuso que mientras para “Barranquilla es una cuestión de ingresos, pero para Puerto Colombia es desarrollo, progreso y bienestar social de nuestra gente”.
El alcalde fue enfático al defender que este territorio ha pertenecido históricamente al municipio y que así se demostrará en el marco del proceso ante el IGAC y la COT del Congreso.
“Histórica y tradicionalmente, la planificación de Puerto Colombia siempre ha sido fundamentada por los planos cartográficosgeorefenciados del Igac. Con base en esto se deriva, que la jurisdicción territorial, ha sido ejercida pacífica e ininterrumpida en las últimas décadas, lo que ha permitido una trascendental transformación de todo nuestro territorio”, recalcó Cedeño.
El mandatario fue enfático al sostener que un ejemplo palpable corresponde al desarrollo del acueducto, el cual “se construyó en el ámbito del desaparecido caserío de Ciénaga grande, de acuerdo con el Decreto ley 483 de 1906 jurisdicción de Puerto Colombia”.
Puso de presente que la pérdida de dicho territorio podría suponer afectaciones fiscales para el municipio, al punto de volver a ser de categoría sexta.
“Perderíamos el 71% de nuestros ingresos fiscales o estaríamos condenados a convertirnos en una alcaldía menor.
Para Puerto Colombia es “un asunto de dignidad y desarrollo territorial, la cual hemos ejercido con responsabilidad, pacífica e ininterrumpida en el plano político, económico, social, medioambiental y en todos los órdenes”.
Recalcó que las “pretensiones expansionistas” de Barranquilla se encuentran sustentadas en un acta de deslinde de 1951, basada en la Ordenanza número 17 de 1912, la cual fue derogada.
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“He dado instrucciones a mi despacho y a nuestro apoderado judicial para que no escatimen esfuerzo alguno en el plano técnico, jurídico, administrativo y político con el finde evitar que un solo centímetro de nuestra comprensión territorial sea cedido”, remarcó.
Por último, Cedeño indicó que “más allá de lo económico, el llamado Corredor Universitario es parte de la comprensión y dignidad territorial de Puerto Colombia”.
