El gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, no descarta que se extienda el proceso de negociación con la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) para asumir el manejo de un tramo de 12 kilómetros de la Vía al Mar para así posibilitar el desmonte del peaje Papiros.
Si bien inicialmente se había anunciado un plazo de 60 días para adelantar dicho proceso, el mandatario departamental reconoció que se presentan una serie de inconvenientes y que se encuentran a la espera de una propuesta por parte del Gobierno para avanzar a la siguiente fase.
“Estamos esperando que nos den una solución. Ellos nos van a traer unas alternativas y las miraremos en conjunto para buscar una solución lo más rápido posible. Hay que facilitar todo lo que sea necesario para que haya una solución definitiva”, enfatizó Verano.
Explicó que el principal inconveniente en el momento corresponde al desbalance financiero que tendría la concesión Ruta Costera por el desmonte del peaje Papiros, por lo que “se avanza en un ejercicio de ingeniería financiera; si les quitamos unos ingresos, ellos tendrían que tomar decisiones”.
Recalcó, además, que en el caso de que no se logre un acuerdo en el tiempo estipulado, se debe explorar otras alternativas como la ampliación de la medida de no cobro, entre otras.
“En este momento hay que esperar. Creo que nos van a cumplir. Esta semana vamos a reunirnos nuevamente para analizar el tema”, agregó el mandatario departamental.
Tres puntos clave en el proceso
Recientemente, el secretario del Interior, José Antonio Luque, aseguró a EL HERALDO que desde la administración departamental se encuentran listos para asumir el tramo de la vía y que se encuentran a la espera que se defina el mecanismo correspondiente.
“La variable tiempo es la que hoy a todos nos trae con preocupación, porque efectivamente se dieron 60 días para terminar todo el proceso. Seguimos en ese ejercicio de terminarlo, trabajando duro para poder lograrlo”, reconoció el funcionario.
En ese sentido, explicó que “nos interesa tener un trabajo impecable en el sentido jurídico y financiero para que esto no nos traiga problemas más adelante, porque hay que cumplir muchas normas que como Gobernación estamos obligados a cumplirlas. Y además es nuestra responsabilidad que esto quede muy bien montado como se está haciendo”.
El secretario del Interior expuso que se trabajan tres enfoques o ejes para poder concretar el traspaso de la vía y en definitiva eliminar la caseta de Papiros. Entre esos está el tema técnico de infraestructura que –según Luque– está “avanzado” y “analizado”.
“Es un proceso ya estandarizado por la ANI y en teoría es muy fácil. Nos va a evaluar a nosotros al momento en que empecemos la operación y el mantenimiento, ya se hicieron los recorridos por la vía y se siguen haciendo”, puso de presente.
Los otros dos ejes corresponden al ámbito jurídico y financiero. Al respecto, Luque señaló que el tema legal conlleva dos frentes, el interno que compete a la Gobernación y el externo exclusivamente de la ANI.