En los últimos años, el desarrollo de proyectos de energías renovables registra un notable crecimiento en el país. El avance de Colombia hacia la transición energética, como parte de su compromiso con el planeta para mitigar los efectos adversos del cambio climático, se viene reflejando en la diversificación de su matriz energética.
Leer más: Distrito reactiva programa de huertas escolares en colegios oficiales
La transición energética es un compromiso global que tiene como propósito ir reemplazando los combustibles fósiles, como el carbón y el petróleo, por fuentes de energía renovable, como la solar y la eólica.
En línea con esta tendencia, en el país se está en el proceso de transición y se está promoviendo la generación de energía de fuentes más limpias.
En este sentido, la región Caribe se ha convertido en una zona estratégica para que generadoras de energía como Isagen lideren importantes proyectos energéticos como los parques eólicos Guajira I y Wesp 01 en Uribia, Alta Guajira, y los parques Bosques Solares en Sabanalarga, Atlántico.
Lea además: ¡A sacar paraguas!: fuertes lluvias durante el puente festivo en el Caribe
Estos proyectos de bajo impacto ambiental no solo le aportan al país una energía limpia, sino que además impulsan el desarrollo económico y social de las comunidades locales.
Al generar energía verde a través de fuentes de energía renovable, además de los beneficios ambientales se les suma el impacto positivo, social y económico a las comunidades en el área de influencia en donde operan estos parques energéticos.
De interés: Concejo de Malambo aprueba Plan de Desarrollo 2024-2027
Ese es el caso de los corregimientos de Cascajal y Gallego y la vereda Patilla, en el municipio de Sabanalarga. Desde la construcción de cinco parques solares, Isagen ha brindado a la comunidad una serie de beneficios, incluyendo mejoras en sus vías de acceso, capacitación en formulación de proyectos, generación de empleo y apoyo a instituciones educativas en temas ambientales, entre otros aspectos.