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Un total de 60 proyectos de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA) se encuentran en riesgo de quedar desfinanciados ante la incertidumbre financiera que se ha desprendido a causa del anuncio del Área Metropolitana de Barranquilla (AMB) de convertirse en autoridad ambiental.

Aunque aún no existe claridad sobre las rentas que conformarán el patrimonio de la nueva autoridad ambiental, desde la CRA han hecho un llamado de atención ante las 'inminentes' modificaciones a su presupuesto, teniendo en cuenta que el 80% de sus ingresos provienen de las entidades territoriales que conforman al AMB.

'De afectarse, así sea en un mínimo porcentaje el presupuesto proyectado para la Corporación, se imposibilitaría la completa ejecución de nuestro plan de acción institucional para el cuatrienio', explicó Jesús León Insignares, director de la CRA, en diálogo con EL HERALDO.

El funcionario sostuvo que entre los proyectos directamente afectados se encuentra la formulación de los Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográfica (Pomcas) correspondientes al mar Caribe, río Magdalena y canal del Dique.

León Insignares resaltó que estos instrumentos son clave porque permiten un uso coordinado del suelo, de las aguas, de la flora y la fauna y el manejo de la cuenca de los ecosistemas mencionados.

También indicó que la implementación del Pomca de la Ciénaga de Mallorquín pende de un hilo, lo que afectaría la preservación y conservación de este cuerpo de agua.

Otros proyectos

El director de la CRA indicó que los trabajos para la recuperación y manejo de humedales como el embalse El Guájaro y las ciénagas de Malambo, Sabanagrande, Santo Tomás, Palmar de Varela y el Lago del Cisne, entre otros, también se verían afectados.

El funcionario indicó que en estos espacios se adelantan diversas acciones tales como dragados, mantenimiento de las compuertas y restauración de diques.

Otro de los proyectos en riesgo es la reducción de los aportes de contaminación a los cuerpos de agua a través de sistemas de tratamiento de aguas residuales, en particular, las Plantas de Tratamiento de Juan de Acosta, Piojó y la Regional, que contempla a Santo Tomás, Sabanagrande y Palmar de Varela.

Por otro lado, se suspenderían los monitoreos de la calidad del recurso hídrico de las aguas continentales y marinas, así como la implementación de medidas de adaptación a los efectos del cambio climático asociados al recurso hídrico tales como la reconformación de taludes y/o diques de protección.

Además, se paralizaría la construcción de la canalización para la recuperación paisajística y ambiental del arroyo El Salao, que se encuentra en Soledad.

León Insignares expresó que no contarían con los recursos para dar continuidad al programa de áreas protegidas, que contempla la declaración de 1.500 hectáreas tras la adquisición de 100 hectáreas y la restauración de otras 200.

Ante este panorama, el director de la CRA expresó que se encuentran a la espera de la invitación formal para hacer parte del proceso de articulación y dar inicio a los comités que fueron enunciados en el mencionado Acuerdo Metropolitano.