El parque Johnny Cay, una de las principales atracciones turísticas del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, se cerró desde este lunes y de forma indefinida debido a un incumplimiento en el control de la capacidad de carga del sitio, denunciado por la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Departamento Archipiélago de San Andrés, Coralina.
La decisión se tomó después que la Corporación verificara e inspeccionara que las normas contempladas en el plan de manejo se estuvieran cumpliendo. Entre ellas está la disposición final de residuos sólidos, higiene en los restaurantes, vigilantes del cuidado de la naturaleza y especies del cayo, así como buen uso de baños y demás.
El incumplimiento en el cuidado de este conocido islote de 1,5 kilómetros de extensión fue verificado también por la Procuraduría, que ya había pedido su cierre.
Lo primero que queda prohibido es el ingreso de visitantes al parque natural, así como el arribo de embarcaciones particulares y la prestación de todo tipo de servicios incluyendo restaurantes, aseadores, deportes náuticos y demás.
Las embarcaciones de carácter oficial, 'que tengan como finalidad asuntos propios de sus competencias y funciones' quedarán por fuera de la prohibición, resaltó Coralina.
Acorde a una comunicación dada a conocer por la Procuraduría el pasado 25 de abril, el ministerio público solicitó el cierre del Johnny Cay y la reevaluación del régimen de ingreso de turistas y de las actividades comerciales que se desarrollan allí.
Según este ente de control, estas medidas buscan garantizar el derecho colectivo al medio ambiente de los colombianos que residen el archipiélago.