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Al escuchar el nombre de Marie Fredriksson quizá este no sea inmediatamente reconocido, pero no se puede hablar de la explosión del pop en la década de los 90 sin mencionar a Roxette, el dúo que la artista sueca conformó en 1986 con el cantante y compositor Per Gessle, famoso por canciones como Listen to your Heart, Spending My Time y la banda sonora de la película Mujer Bonita (1990), protagonizada por Julia Roberts y Richard Gere, It Must Have Been Love. Todas tres con sus respectivas versiones en español con las que conquistaron al mercado iberoamericano, Habla el corazón, Un día sin ti y No sé si es amor, que hacen parte del disco Baladas en Español (1996).

La cantante principal del dúo pop sueco murió a los 61 años, después de una larga lucha contra el cáncer. 'Con gran tristeza anunciamos que Marie Fredriksson, de Roxette, falleció en la mañana del 9 de diciembre, después de una larga batalla de 17 años contra un cáncer', precisó Dimberg Jernberg Management, su agencia representante.

Por su parte, Per Gessle lamentó la muerte de su compañera de banda y agradeció por todo lo que compartieron juntos: 'El tiempo pasa muy rápido. Parece que fue hace poco cuando Marie y yo nos sentamos en mi pequeño apartamento en Halmstad y compartimos sueños. ¡Y qué fantástico sueño tenemos para compartir! Gracias Marie, gracias por TODO (...) Las cosas nunca serán lo mismo'.

Lucha contra el cáncer. A Marie Fredriksson se le diagnosticó un tumor cerebral grave en 2002, pero comenzó a recuperarse y volvió a grabar en 2010. En 2016, Roxette volvió a salir de gira con el The Neverending World Tour, en ese entonces sus médicos le aconsejaron dejar de viajar y descansar.

'Fue el 11 de septiembre de 2002 cuando comenzó el infierno', son las palabras con las que la intérprete describió la enfermedad y que abren el libro autobiográfico, Listen to Your Heart, escrito por Helena Von Zweigbergk basado en lo que Fredriksson le contaba, pues ella tenía problemas para escribir correctamente como consecuencia del tratamiento médico al que se encontraba sometida para curar el cáncer.

Ese día, la vocalista de Roxette se desmayó en su casa y despertó en la cama de un hospital. '¿Me voy a morir?', fueron sus primeras palabras al abrir los ojos. Los estudios habían detectado un tumor cerebral.

Pérdida del pelo y de la visión en su ojo derecho, desfiguración de su rostro, problemas auditivos, de motricidad y el olvido de palabras, incluso las letras de sus canciones, fueron secuelas del tratamiento. Cuando empezó a perder el habla, los médicos decidieron operarla.

'He pasado trece años de mi vida bajo el estigma del dolor, pero nunca me he rendido ni lo voy a hacer. Continuaré luchando hasta que ya no pueda más', explicó en el libro en el que recuenta la lucha con la enfermedad.

Roxette, formada en 1986 por Fredrkisson y el guitarrista Per Gessle, vendió más de 80 millones de discos en todo el mundo y sus éxitos llevaron al dúo a convertirse en el acto más popular de Suecia luego de ABBA.