Marruecos ha restaurado y reabierto para el gran público el complejo arqueológico de Lixus, junto a la ciudad de Larache, el que fue a principios del siglo I de nuestra era el gran puerto pesquero del occidente romano y donde dicen que Hércules realizó uno de sus doce trabajos.
Enclavada en una colina sobre el estuario del río Lukos y enfrente de la ciudad de Larache, Lixus ha sufrido durante años el abandono y la desidia, pero por fin cuenta con un circuito turístico de algo más de un kilómetro y un centro de interpretación para los visitantes.
'Sólo hemos excavado el 15% de las ruinas de un complejo que en su momento de esplendor ocupaba sesenta hectáreas', dijo el arqueólogo Mohamed Kabiri Alaoui.
El momento de esplendor de Lixus se produjo en el reinado del emperador Claudio (41-54 d.C.), cuando la ciudad era una gran factoría de salazones de pescado y del 'garum' romano, una especie de caviar hecho a base de sangre, hígados, huevas e intestinos de pescados que podían consumirse durante años.