La muerte del rapero californiano Nipsey Hussle, asesinado el domingo en Los Ángeles, mostró la cultura de violencia que impregna las calles estadounidenses y también el imaginario que predomina en el rap.
Muerto a tiros , el músico fue víctima de la violencia con la que creció y que intentaba combatir.
Para muchos, el asesinato del rapero de 33 años se inscribe en la línea de los tiroteos de la década de 1990, que cobraron las vidas de estrellas del hip hop como Tupac Shakur y Notorious B.I.G.
Pero la pregunta es sí Nipsey Hussle será el último de tantos músicos talentosos, muchas veces nacidos en barrios pobres y asociados a las pandillas, que han muerto en la flor de la vida.
'La música no tiene nada que ver', contesta Najee Ali, activista de derechos humanos en California. 'La pobreza y las zonas menos favorecidas, son lo que generan la violencia, no la música'.
Los mensajes fúnebres de estrellas como Beyonce, Kendrick Lamar, Drake y Cardi B o por personas anónimas de su barrio Crenshaw, en el sur de Los Ángeles, han enfatizado en su trabajo comunitario en el distrito en que creció y deploraron los tiroteos que casi siempre afectan a jóvenes negros de EEUU como Nipsey Hussle.
'Esto duele', escribió en Instagram el rapero newyorquino Nas. 'Es peligroso ser un MC (rapero). Peligroso ser un jugador de pelota. Es peligroso tener dinero. Peligroso ser un hombre negro'.
Por décadas, el púbico relacionó el rap con las pandillas. En sus comienzos, el hip hop de la costa oeste de Estados Unidos se desarrolló mucho en territorios de pandillas, poniendo en palabras y música la miseria y la injusticia social que asolaban a muchos barrios en los año 80.
En la década siguiente el 'gangsta rap' se aseguró el éxito con letras que hacían apología de las armas de fuego, de la droga y el machismo, con raperos como Snoop Dogg, conocido por ser de la pandilla Crips.
'El rap es un género musical que exige una gran autenticidad de parte de sus artistas', explica Geoff Harkness, sociólogo de Rhode Island College y especialista del hip hop.
'Incluso para los músicos de rap que no están interesados o vinculados con la violencia, hay una inmensa presión por ganar autenticidad, credibilidad a través de actos violentos', dijo.
En su vida había pasado por episodios especialmente violentos. Como muchos otros antes, Hussle perteneció a la pandilla de los Crips y su música era un eco de la vieja escuela del rap gangsta. Sin embargo en los últimos años, se comprometió con el combate a la violencia de Los Ángeles.
Captura. Un hombre de 29 años sospechoso de matar a Hussle fue arrestado ayer al mediodía y permanece en custodia, anunció la policía de la ciudad.
Eric Holder había sido identificado el lunes, gracias a imágenes de cámaras de vigilancia que capturaron el momento de la muerte del músico de 33 años, abatido de varios disparos frente a su tienda de ropa.