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'De mi casa me echó mi mujer por andar con el tira que jala, me pilló con la venezolana. Esa chama tiene un bebé, ahora compa ¿qué voy a hacer? Pero mira como he quedado con esa chama y ese pelao'. Inicio de la canción La venezolana.

Ana Valesillo se llevó las manos a la boca. Nunca había escuchado la canción La venezolana, un hit radial que está pegando desde finales de 2018 en las emisoras de Barranquilla.

La mujer abrió los ojos como platos al escuchar el coro: 'mantenga, mantenga, mantenga su venezolana' , y dejó escapar una sola palabra: 'Denigrante'.

Por la crisis del vecino país, Valesillo, de 30 años, decidió abandonar su natal Maracaibo para probar suerte en Colombia. En la actualidad trabaja como vendedora de bolis en la calle.

Andrés Gómez, por su parte, opina que este tema no es para tomárselo a pecho. 'Es una canción de desorden. No es para armar drama ni polémica', manifestó.

Creadores

El tema champetero fue creado por los artistas Pirx 06, Nando Black y Kevinman, quien compuso la letra.

La inspiración, según Kevinman, cuyo nombre de pila es Keivis Jiménez, nació dé 'la cantidad de venezolanas que hay ahora en Colombia'.

'Me basé en que los hombres al ver tantas mujeres desempleadas echan sus canitas al aire. Las venezolanas son muy hermosas y los hombres caemos por ser machistas. La canción no tiene la intención de ofender a la mujer porque en el tema el hombre es el que falla', enfatizó.

La canción empezó a sonar con el Rey Arturo, un reconocido picotero en Barranquilla. En la actualidad se escucha en Sincelejo, Santa Marta, Montería, Bogotá y San Andrés.

'Grabé con pista y todo, pero no la quería cantar por eso se la di a Pirx 06 y a Nando Black para que fueran los intérpretes', dijo.

¿Xenofobia?

Bernardo Mena, conocido como Nando Black, uno de los cantantes de La venezolana, explicó que la canción no busca extender mensajes xenofóbicos.

'Nosotros hablamos de lo que pasa que es real. Muchos hombres han dejado sus hogares por las mujeres de Venezuela. No queremos ofender a nadie', señaló.

Contraria a la declaración de los champeteros, la venezolana Emma Zambrano, de 38 años, aseguró que esta canción tiene implícito un mensaje de xenofobia y aversión por la nacionalidad venezolana.

'Es muy indignante porque nos hace sentir como si las venezolanas fuéramos mujeres fáciles que vinimos a quitarles los esposos a las colombianas. En Venezuela hay muchos colombianos y nunca escuché una canción así para la gente de este país', dijo.

Con ello concuerda Keilin Lovera, una caraqueña que vende agua en la esquina de la Catedral Metropolitana María Reina y está en Barranquilla hace nueve meses.

'Yo vine fue a trabajar. Tengo amigas tinteras que buscan una mejor calidad de vida para sus hijos y cuando están
aquí los colombianos las irrespetan, las manosean y las morbosean. No tenemos la culpa de esta crisis', dijo.

Pilin León, presidenta de la asociación de venezolanos en Barranquilla, opina que la canción no es 'necesariamente insultante'.

'Por lo que escuché cuenta la historia de un tipo que se enamora de una venezolana con un hijo y le toca atenderlos por lo que se entiende que la venezolana no trabaja.

No es necesariamente insultante pero insinúa que las venezolanas buscan un hombre que las mantenga. Lo que me disgusta es el video que aparece con el audio de la canción', dijo refiriéndose además al video que aparece en Youtube.

José Daniel Briceño, manifestó sentirse ofendido por la letra de la canción como señal de empatía por las mujeres de su país.

'Todas las mujeres, así como todos los seres humanos merecen respeto. Las trabajadoras sexuales se ofenden si les dicen una palabra insultante. Es muy molesto y genera impotencia que maltraten a las mujeres tanto de mi país como de cualquier otro', afirmó Briceño.

Desde el feminismo

Para Dayana De la Rosa, filósofa y miembro del comité curricular de la Maestría de Género de la Universidad del Atlántico, hay una asociación entre ser mujer y ser migrante.

'Las que migran, generalmente, para sostener la familia son las mujeres. Es decir, la mujer venezolana está sufriendo en este momento dos tipos de vulneración y discriminación una por ser mujer y otra por ser venezolana. Las mujeres, por lo general, somos objeto de deseo, objeto de complacencia, objeto de posesión. Estas canciones logran ponernos en ese lugar en el que histórica y culturalmente hemos estado. No como sujetas de deseo, ni de derechos, sino como objetos de'.

Dayana dijo que la canción es un reflejo de lo que la gente siente y piensa.Identifica las venezolanas como un objeto.

'Eso es mantenerlas las convierte en un objeto para satisfacer un imaginario de que la venezolana viene a ejercer prostitución.De eso hemos sufrido todas las mujeres cada vez que migramos. En Venezuela cuando la situación fue al revés el rótulo de las colombianas era de prostitutas entonces creo que está ocurriendo el fenómeno inverso.Eso es un reflejo de la construcción cultural que tenemos en el que el hombre tiene que mantener a la mujer y ese mantener significa comprarla, adquirirla, es mía, es de mi propiedad, es mí posesión. Aunque parece un tema jocoso, chévere e inofensivo, genera una justificación cultural que después termina en los feminicidios, violencia intrafamiliar y de género. Cuando una mujer depende económicamente de un hombre, en ocasiones, se convierten también en una propiedad y por eso son maltratadas'.

'No es un insulto'

Christian Guzman, cuyo nombre artístico es Prix 06, uno de los cantantes de La venezolana, paradójicamente tiene también nacionalidad de este país.

Para el artista la canción tiene una de 'esas historias de esquina contadas entre amigos de forma burlesca pero jocosa'.

Para el champetero la canción no es un insulto, puesto que su naturaleza es divertir, entretener y 'mamar gallo'.

En eso está de acuerdo uno de sus coequiperos, Nando Black, quien opina que 'la canción se hizo con mucho respeto a las venezolanas'.

'Este tema no es para estigmatizar ni para ofender a nadie, sino para que la gente disfrute'.

Raimundo Barrios, director de Madrigal Stereo dijo que la canción 'empezó arriba porque la temática causaba gracia'.

'La canción se viene programando desde el año anterior y es pedida por los oyentes. Ya en precarnaval se unieron otras champetas como El rompecabeza, de Papoman; Ejemplo de amor, de Luister, entre otras.

Merly Aycardi, una barranquillera que trabaja en el centro de la ciudad, dice estar de acuerdo con la canción porque muchas de sus amigas han 'perdido a sus esposos por venezolanas'.

Spencer Vásquez, un transeúnte que pasaba por el lugar fue indagado sobre La venezolana y al escuchar la canción dijo resumir lo que le generaba en una sola palabra 'indignación'.

'Nos falta entender a los demás. En especial por personas que están luchando tanto para sobrevivir en medio de tanta precariedad', concluyó.