Luxemburgo quiere despenalizar la producción y el uso 'recreativo' del cannabis para adultos, según el acuerdo de coalición firmado ayer por los socios del nuevo gobierno encabezados por el liberal Xavier Bettel.
'Se elaborará una legislación sobre el cannabis recreativo', reza el acuerdo firmado por el partido liberal de Bettel, el partido socialista y el partido ecologista, que no precisan ningún calendario sobre su adopción.
Según el acuerdo para la legislatura 2018-2023, la actual coalición, que seguirá así en el poder en virtud de los resultados de las elecciones legislativas del 14 de octubre, establece su objetivo sobre el cannabis.
Luxemburgo busca 'despenalizar, incluso legalizar bajo unas condiciones a definir, la producción en el territorio nacional, así como la compra, la posesión y el consumo de cannabis recreativo para las necesidades personales de los residentes mayores de edad'.
El nuevo gobierno, cuyos ministros se conocerán el martes, precisa que los 'ingresos procedentes de la venta de cannabis se invertirán prioritariamente en la prevención, sensibilización y la atención en el vasto campo de las adicciones'.
Canadá se convirtió en octubre en el segundo país del mundo en legalizar la marihuana recreativa, cinco años después de Uruguay. En Europa, Holanda tolera la posesión, el consumo y la venta al por menor, mientras que varios países legalizaron su uso terapéutico.