Jean-Pierre llegó como refugiado a Italia. De inmediato aceptó unirse al Teatro Cenit como parte de su proceso de rehabilitación, pero los formadores notaron que el joven nunca se descalzo durante las clases –acción llevada a cabo por todos los integrantes como forma de regresar a la infancia–, al pasar seis meses en los talleres y estando a punto de actuar en una obra de teatro huyó a un rincón y se quitó los zapatos.
'Sus pies estaban completamente deformados, destruidos, se habían ensañado con él en esa parte de su cuerpo, por eso nunca se había atrevido a mostrarlos', relata Nube Sandoval, directora del grupo colombiano Teatro Cenit.Por más de 25 años, ella y el también director Bernardo Rey han ayudado a través del teatro a un sin número de refugiados víctimas de tortura y persecución en Italia y a víctimas de guerra y a poblaciones en condición de desplazamiento en Colombia.
El martes 12 de diciembre fueron exaltados en Roma con el premio Catarsi-Teatri delle Diversitá 2017 por su trabajo social y humanitario.
'Es un galardón que recibimos de la Asociación Nacional de Criticos de teatro de Italia junto con la revista europea Teatri delle Diversitá, en reconocimiento al trabajo que el grupo viene realizando en Colombia y en Italia usando el teatro como un instrumento para la transformación social, a través de la metodología llamada ‘teatro como puente'.
Esta idea nace a mediado de los años 90, luego de que el equipo iniciara una serie de talleres dirigidos a personas en situaciones sociales vulnerables.
'Empezamos a entender que se podía plantear a través del teatro un proceso de empoderamiento de las personas para reforzar el sentido de pertenencia, para crear procesos de resiliencia a través de un trabajo practico y muy completo como es el teatro'.
Explica que cuando conjugaron el canto, la danza, el ritmo, la improvisación, el juego colectivo y todos los elementos artísticos que envuelven la dramaturgia 'nos dimos cuenta que tenía un efecto muy positivo y muy rápido en poblaciones vulnerables.
Empezamos a profundizar la investigación y fue así como la hemos venido aplicando en diferentes países'.
Su labor de reintegración y rehabilitación que se ha convertido en un verdadero puente que traspasa lenguaje, barreras y 'que ha logrado sanar desde los recuerdos positivos que no han sido tocados por los horrores de la guerra', se ha efectuado con sobrevivientes de Afganistán, Irak, India, Siria, Palestina,Congo, Burundi, Costa de Marfil, entre otros.
La academia y la prensa italiana han tenido identificado al Teatro Cenit por sus resultados positivos en cuanto a la restauración integral y artística que tienen los beneficiados.
'Por la calidad de las obras que se realizaban luego de cinco o seis meses de talleres en Italia, nos entregaban los mejores escenarios y los más prestigiosos como el Teatro Argentina, de Roma'.
Desde el 2013 los bogotanos visitaban temporalmente Colombia para traer la experiencia del 'teatro como puente' a las comunidades afro e indígenas, y desde el 2016 están radicados en Minca, Magdalena donde se encuentran construyendo una sede que 'conjugará arte, resiliencia y ecología'.