Clint Eastwood demostró este domingo en Cannes que todavía tiene cartuchos en la recámara. A sus 86 años, prepara como director una película sobre un ataque yihadista en un tren en Francia en 2015, y asegura que volverá a actuar.
'Me gusta jugar al golf, pero no quiero estar obligado a jugar al golf', bromeó Eastwood, al ser preguntado por qué sigue trabajando.
Su llegada a Cannes fue un acontecimiento. El sábado participó en la presentación de la versión restaurada de su película 'Sin perdón', y este domingo ofreció una entrevista ante unas 200 personas que lo ovacionaron de pie durante varios minutos.
Vestido con ‘jeans’ y zapatillas deportivas, Eastwood se mostró sonriente, aunque no abundó en sus respuestas.
'Volveré a actuar algún día', dijo Eastwood. 'A veces lo echo de menos', añadió esta leyenda del cine, que ha ganado cuatro Óscars y protagonizado películas durante medio siglo, desde 'El bueno, el malo y el feo', hasta 'Gran Torino'.
Mientras tanto, confirmó que dirigirá un filme sobre la heroica historia de tres estadounidenses (y otros) que evitaron un ataque terrorista en un tren que iba de Ámsterdam a París el 21 de agosto de 2015.
Eastwood explicó que como director trata de no perder nunca el control y que le gustan los rodajes 'silenciosos'. Contó que una vez en la Casa Blanca se dio cuenta de que los agentes de seguridad hablaban todos por auriculares con micrófonos sin que nadie los oyera.
'Lo probamos y desde entonces he trabajado así', señaló.
Eastwood hizo un repaso a su carrera. Evocó películas como 'Harry el sucio', de 1971. 'Ahí fue el principio de la era de lo políticamente correcto, algo que nos está matando', dijo el actor, que apoyó al republicano Donald Trump en la campaña presidencial.
'Hemos perdido el sentido del humor', lamentó.
Al recordar 'Los puentes de Madison', que dirigió e interpretó, tuvo unas palabras enigmáticas sobre su compañera de reparto, Meryl Streep. Cuando se le preguntó si se había divertido rodando con ella, dijo: 'Sí, fue divertido' y guardó silencio, provocando las carcajadas del público.