El Staples Center, de Los Ángeles, fue nuevamente el escenario encargado de reunir a los artistas más sobresalientes de la industria musical en la entrega número 59 de los Premios Grammy. Una velada de sorpresas, homenajes y presentaciones musicales que llamaron la atención de los asistentes y de los espectadores en redes sociales, el pasado 12 de febrero.
Con el reconocido tema Hello, de su más reciente álbum 25, la cantante británica fue la encargada de abrir la ceremonia con un brillante vestido de lentejuelas de colores negro, rojo y rosado.
Se le pudo ver a la artista nuevamente en el escenario cuando se disponía a realizar un homenaje al fallecido cantante George Michael. Sin embargo, cuando se encontraba interpretando la canción Fast Love, Adele interrumpió la presentación, luego de notar que había iniciado la canción con fallas y ante el público expresó: 'Lo siento, la he cag.... Tenemos que parar. Perdón por decir una palabrota, pero no podemos seguir así'. Ante este episodio, varios asistentes se pusieron de pie y, a través de aplausos, demostraron su apoyo a la artista para que comenzara de nuevo con su interpretación.
A pesar del incidente, Adele se reivindicó tras convertirse en la gran ganadora de la noche con 5 galardones: Canción del Año, Mejor actuación solista, Grabación del Año, Mejor álbum pop y Álbum del Año.
No obstante, esta última estatuilla se la dedicó a Beyoncé, otra de las nominadas en la categoría, a quien consideró como su ‘ídolo’.
'No puedo aceptar este premio, me siento muy honrada y estoy muy agradecida, pero Beyoncé es la artista de mi vida', estableció la cantante británica en su discurso de agradecimiento.
Con voz entrecortada, Adele estableció que el más reciente álbum de la cantante americana Lemonade es monumental y muy bien pensado.
Además, confesó que se siente muy agradecida con Beyoncé puesto que se atrevió a mostrarle al mundo una nueva faceta de su vida.
Cabe recordar, que el álbum Lemonade retrata la fortaleza que tiene la mujer afrodescendiente para convertirse en líder de la sociedad, las problemáticas de pareja a las que se afronta, envía un mensaje sobre la histórica etapa de la esclavitud y realiza unas críticas implícitas sobre el lado oscuro de la industria musical.
Aun no se conoce con certeza si Adele recharazaría oficialmente el Premio. De hacerlo, seguiría los pasos de la irlandesa Sinead O'Connor, quien en 1990 no aceptó el galardón como símbolo de protesta al considerar que la ceremonia se movía solamente con intereses comerciales.
‘Queen B’
Con la ayuda de efectos visuales, la presentación que se robó toda la atención estuvo a cargo de Beyoncé. La cantante interpretó los temas Love Drought y Sandcastles vestida de un diseño dorado y ajustado de Peter Dundas, acompañado de una corona y gargantilla del mismo color, que reflejó de la mejor manera su maternidad. Hace unos días, la cantante anunció que está embarazada de gemelos.
La aparición en escena de la artista estuvo acompañada de un monólogo que resaltó el valor de la fertilidad, perseverancia y unidad de las mujeres. A pesar de no ganar en las 9 categorías en las que estaba nominada, Beyoncé se llevó dos estatuillas.