En medio de una diminuta y oscura cueva, rodeada de los árboles que el Zoológico de Barranquilla ha dispuesto para su entorno, y en las horas de la noche, una familia de pequeños primates recibió el pasado 29 de enero a sus nuevos dos integrantes.
Se trata de los titíes panameños, uno de los cinco grupos de titíes que se encuentran resguardados en el zoo, y que se pueden encontrar en la región del Chocó y en todo el Pacífico, desde el norte de Ecuador hasta Panamá.
Esta subespecie de titíes, conocidos científicamente por el nombre de Saguinus geoffroyi, son primates caracterizados por su pelaje blanco y negro, y su pequeño tamaño: cerca de 40 centímetros, incluida su larga cola.
Según Christian Olaciregui, jefe de Biología y Conservación del zoológico, son una subespecie muy prolífica; más del 90% de las veces tienen mellizos, y algunas raras veces trillizos; a diferencia de otros primates como los humanos, los chimpancés, mono araña, macacos, que se caracterizan por tener una sola cría.
'En los últimos tres años hemos tenido partos de estos titíes, todos de mellizos', comentó Olaciregui. 'Estos partos no son programados. Ellos se reproducen cuando su ciclo así lo amerita. En este sentido, la reproducción es un muy buen indicador de la salud y el bienestar de los animales' añadió.
Estos primates, que únicamente se reproducen una vez al año –casi siempre en el primer trimestre–, son considerados como un grupo bastante familiar, pues se acostumbra a que las crías del primer parto ayuden a cuidar a las del segundo o las de los próximos partos.
'Los machos forman parte activa del cuidado de los pequeños. Al segundo día, los padres ya están cargando en el lomo a las crías, mientras que en otras especies, como los papiones y los macacos, los machos no ayudan en nada, la hembra es la que se hace cargo de todo durante meses, hasta que estos se independizan de ella', explicó el biólogo.
El período de gestación de los titíes es de aproximadamente tres meses, y sus épocas reproductivas pueden variar según el hábitat, las condiciones climáticas y meteorológicas, los factores abióticos como la temperatura y la humedad. 'Algunas de las subespecies de titíes en vida silvestre se reproducen entre marzo y abril, y otras entre septiembre y octubre. Mientras que en cautiverio, dependiendo de la zona donde se encuentre el zoológico, esta se puede dar entre enero, febrero y marzo', señaló Óscar Medina, coordinador de Cuidado Animal. 'En otros zoológicos del país, se pueden aparear a mitad de año o a finales, como en diciembre', continuó.
'En este caso, ellos solo se aparean durante una sola época del año, tienen ese ciclo evolutivo inmerso en ellos', concluyó el cuidador.
CRÍAS SORPRESA. Hasta el momento, la única forma que tienen los encargados de estos animales de darse cuenta o sospechar del estado de gestación de la especie es por medio del abultamiento abdominal que se genera en las hembras, percibido por sus cuidadores.
'El zoológico está trabajando en la obtención de nueva tecnología que permita detectar y monitorear los embarazos. Hasta ahora, todos los partos han sido sorpresa. Nos damos cuenta porque, al día siguiente del parto, la madre ya tiene en su lomo al par de crías', comentó Olaciregui.
'A diferencia de otros primates, como el mono araña o un papión, en los cuales la cría se aferra al abdomen, en los titíes las crías se aferran es a su lomo, debido a la postura de estos, que son más cuadrúpedos y que viajan por las ramas en posición horizontal', agregó el experto.
Luego del parto, el cual no es asistido, se les aumenta un poco la alimentación –una dieta balanceada a base de frutas, verduras y proteína de origen animal (gusanos, huevos, grillos), además, de tenebrios como presa viva– a los primates, ya que la hembra se encuentra en período de lactancia. Durante este tiempo, las crías solo se alimentan de leche materna.
Un dato curioso de esta especie de animales es que, por ser tan pequeños, se independizan más rápido que otros primates. Entre más corto el período de gestación, más corto es el período de dependencia hacia la madre.
'Como son pequeños, se podría decir que son presa fácil, por ende deben aprender a ser independientes. Por ejemplo, en las marimondas el período de gestación es de cinco meses, y ese en promedio es el tiempo que tardan en lograr ser independientes de su madre' manifestó el jefe de Biología del zoológico.
Otras subespecies de titíes que se pueden encontrar en el zoológico de Barranquilla son el gris y el cabeciblanco, hallados en el norte de Colombia, y los amazónicos, pigmeo y bebeleche. Entre los cinco grupos de titíes, hay un total de 20 individuos.