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Unas teclas presionadas por los dedos conocedores del pianista Edy Martínez, y unas congas golpeadas por las talentosas manos del percusión is ta neoyorquino Richie Flores, le dieron la bienvenida a la décimo novena edición del festival de jazz, Barranquijazz.

Más de 500 personas se dieron cita ayer en el Teatro Amira de la Rosa, para apreciar lo que sería el comienzo de este encuentro musical, que este año viene cargado de mucha salsa brava.

La primera pieza interpretada fue una descarga musical, fortalecida por el imponente sonido de la percusión, que fue presentada por su intérprete: 'el percusionista del año', y agasajada por un público emocionado.

Después de una animadora introducción musical, Edy Martínez entró a seducir al público con el sonido armonioso de sus teclas, siendo merecedor de cientos de aplausos.

Durante la velada, que transcurrió con calma, 'el cerebro fugado de Colombia' sorprendió a los asistentes con la primera y única entonación de la noche. La frase 'A Barranquilla me voy' fue coreada con emotividad por el pianista y todo su equipo, y el como resultado: la ovación de los espectadores, quienes agradecieron su presencia en la ciudad.

A las 9:57 un adiós en la voz de Edy Martínez anunció el final de este evento de apertura del festival de jazz. Los cuatro músicos se separaron de sus instrumentos y con una venia se despidieron del público Barranquillero. Como regalo final, permitieron que la pieza 'Tema de María Cervantes' le diera un melodioso hasta luego a los más de 500 asistentes, que podrán seguir disfrutando hasta el domingo de este encuentro musical cargado de salsa.