La enorme fila para entrar al concierto de Manu Chao, el jueves pasado, le daba media vuelta a la Plaza de la Paz, sitio donde se realizó el evento y en el cual decenas de personas esperaron en orden para entrar a ver a su ídolo francés.
En la fila, que se desbordó sobre la carrera 46, se podían ver a personas de todas las edades y clases sociales, así mismo, se escucharon diversos idiomas y acentos entre los asistentes, que se apostaron alrededor de la plaza y sobre las escaleras de la Catedral.
Julio Correal, productor de Re Buena Onda, empresa productora del concierto, afirmó que 'Manu Chao en Barranquilla iba a atraer a muchos visitantes provenientes de todas partes de la Costa y el mundo'. Y así se dio.
Encontramos a Manolo Sáenz, turista español, quien estaba en Cartagena, pero viajó a Barranquilla para ver al artista nacido en París, Francia.'Viajé al mediodía, no me podía perder la oportunidad de ver a Manu Chao en un concierto gratuito, en esta bella ciudad', contó Sáenz.
Los teloneros
La banda barranquillera Sicotrópico abrió la velada a las 6:00 p.m. y con sus sonidos rockeros dio inicio al concierto social musical que propuso Manu Chao para Barranquilla.
Cuando cayó el sol, los representantes de las casas distritales de cultura se tomaron el escenario para interpretar éxitos de Manu Chao fusionados con los tambores del Caribe.
La presentación de los grupos Cielito Drive, Bozá y Tubará Reggae fueron encendiendo al público con cortas, pero contundentes presentaciones, para darle entrada al show central que traía el cantautor francés.
Sonaron las sirenas
Las fuertes brisas de estos días no se ausentaron esa noche y sirvieron para refrescar a los asistentes mientras esperaban la presentación del francés. Pero cuando salió Gambeat, su bajista, al escenario, el público enloqueció y alzó sus manos para saludar al músico.
Luego se asomó el veterano Madjid, con la guitarra, jugueteando con el público. Después el turno fue para Garbancito, quien llegó y de inmediato se adueñó de la batería.
Al final salieron dos jóvenes colombianos, Juan Camilo, en la trompeta, y Daniela, en el trombón, quienes eran los encargados de los vientos.
El preámbulo terminó cuando Manu Chao salió revoloteando de la esquina izquierda del escenario, saludando al público, que lo recibió a gritos y brincando de emoción por la fusión de dos temas que abrieron la noche Me cago en el amor y Mr Bobby.
Te lo dije bien clarito
Sin duda alguna, uno de los momentos más emocionantes fue cuando Manu Chao preguntó al público '¿Qué hora son Barranquilla?', y empezó a sonar 12 de la noche en La Habana, Cuba… 11 de la noche en San Salvador, El Salvador. De inmediato el público empezó a corear Me gustas Tú, el éxito más conocido del artista.
Fueron dos horas de espectáculo, en las que Manu Chao cantó temas como Clandestino, King Of The Bongo, Mala Vida, La Vida Tombola, Welcome to Tijuana, Minha Galera, entre otras.
Ambiente único
La Plaza de la Paz estuvo llena en su totalidad, decenas de barranquilleros y foráneos disfrutaron con buen comportamiento de la música y los mensajes de lucha por la naturaleza y no a la guerra que Manu Chao lanzaba entre sus canciones.
Uno de los momentos más especiales fue cuando Ati Quigua, exconcejal indígena de Bogotá, se montó al escenario y agradeció en su idioma nativo la presentación de Manu Chao en el Caribe.
Por su parte, los asistentes quedaron felices por tener al cantante francés en la ciudad. 'Ojalá en Barranquilla se hicieran más seguido este tipo de conciertos, con grandes artistas y gratis', dijo Jan Vivas, asistente.