Después de tres intentos el barranquillero Jorge Mario Peña logró coronarse como el nuevo rey del Festival Francisco El Hombre, que se llevó a cabo el fin de semana en Riohacha.
El jurado lo eligió como mejor cantante y su agrupación conformada junto al acordeonero Juank Padilla obtuvo el premio como mejor grupo vallenato.
El mejor acordeonero fue Gregorio Gutiérrez, quien acompaña al cantante Éder González y juntos conforman la agrupación que estuvo en el concurso representando a Riohacha.
Jorge Mario Peña es un joven de 32 años que ya tiene una gran trayectoria musical en el vallenato, desde que estudiaba en el colegio Colón de la capital del Atlántico. Actualmente cursa sus estudios de medicina, está casado, tiene una hija de 5 años y está próximo a tener otro bebé.
'Agradezco al festival porque ha sido una plataforma para los jóvenes artistas y a todos los que me apoyaron', manifestó minutos después de escuchar el resultado del concurso.
Habían suspendido la actuación de Kvrass. La noche final del Festival Francisco El Hombre se desarrolló de manera tranquila, después de los disturbios que protagonizó un grupo de desadaptados durante la madrugada del domingo.
Las autoridades sin embargo habían decidido cancelar la presentación del grupo Kvrass, para evitar que se volvieran a presentar estos desórdenes.
La agrupación llegó temprano y sus integrantes estaban tristes por la decisión, por lo que el mánager Genovevo Agudelo había prometido que si no cantaban ofrecía un concierto gratis en Riohacha en otra fecha. Sin embargo, poco después la Policía y los organizadores del festival decidieron permitir que el grupo subiera a cumplir con su presentación, lo cual se convirtió en un acierto porque el público respondió con una gran ovación.
La gala de cierre contó con la actuación del salsero Michel El Buenón, además de los reyes de Francisco El Hombre de otras ediciones como Carlos Mario Zabaleta, Pillao Rodríguez, Kbeto Zuleta y Los Hijos del viejo Migue.
La programación culminó con el lanzamiento del disco del Mono Zabaleta con Rolando Ochoa titulado La conquista.