¿Cuántas veces la frase 'un partido y ya' se ha convertido en todo un torneo o 'cinco minutos nada más' en horas de juego que reducen las de sueño?
Antonio* recuerda que cuando era pequeño perdió séptimo por una sola razón: los videojuegos. 'En ese momento estaba en furor Terminator 2, era la máquina que más se llenaba', cuenta.
Los videojuegos son el más reciente integrante de la clasificación de trastornos de adicción de la Organización Mundial de la Salud, la CIE-11, presentada esta semana.
Antonio iba a un lugar que se encontraba en el Centro de Barranquilla y a otro en la calle 70 con carrera 53, pero para costearlo debía pedir dinero en la calle.
'No iba a clase. Salía a mediodía de mi casa con uniforme y me encontraba con mis amigos para irnos a pedir plata y luego, cuando ya teníamos suficiente, nos íbamos a pasar toda la tarde jugando', recuerda.
Esa rutina fue casi todo su año escolar, lo que terminó en un gran regaño por parte de sus papás, y aquella consola de Super Nintendo que pidió nunca llegó.
'Era voluntario de la Cruz Roja y el día de la banderita salí a recoger plata. Cuando me daban billetes esos iban a mi bolsillo y servía para seguir jugando', agrega el que es ahora jugador esporádico de títulos de combate o fantasía, pero en aquella época pudo haber estado a las puertas de la adicción, según la conclusión de la OMS.
Adicción
Alguna vez ha dicho o escuchado 'soy adicto a' al hacer referencia a algo que le gusta o apasiona mucho, ¿qué significa médicamente este concepto?
La dopamina es un compuesto neuroquímico fundamental en la neurociencia de las dependencias. 'Se libera dopamina en respuesta a toda recompensa inesperada, reforzando las conductas que resultan de la recompensa', indica un informe de la Organización Mundial de la Salud sobre consumo y dependencia de sustancias psicoactivas.
Podemos ‘motivar’ nuestro cerebro con una comida deliciosa, con un trozo de pudín de chocolate o también con drogas sintéticas, cocaína e incluso videojuegos.
Entonces, ¿cuál es la diferencia entre el chocolate, la cocaína y los videojuegos? Expertos científicos citados en el informe de consumo y dependencia indican que las drogas adictivas difieren de los reforzadores convencionales en el sentido de que sus efectos estimulantes sobre la liberación de dopamina en el núcleo accumbens (un grupo de neuronas del encéfalo) son significativamente mayores que los reforzadores naturales, como los alimentos.
'Los alimentos incrementan en 45% los niveles de la dopamina en el núcleo accumbens, en tanto que la anfetamina y la cocaína elevan estos niveles en 500%', cita el documento.
Los videojuegos también son estimulantes cerebrales que generan adicción, tal como lo decidió la OMS con la CIE, que es el instrumento fundamental para identificar tendencias y estadísticas de salud en todo el planeta.
Esta institución mundial estima que entre 2 y 3% de los videojugadores tienen un comportamiento abusivo y pernicioso.
'Hay pacientes que usan la adicción para suplir la carencia afectiva o un síntoma que tiene su cuerpo y no saben cómo apaciguarlo, buscan la forma de distraerse para no pensar en la emoción que no los hace sentir bien', explica Laura Páez, médico psiquiatra y docente de la Universidad del Norte.
Juan Isaac Llanos, presidente de la Asociación Colombiana de Psiquiatría, manifiesta que esta adicción es similar a la del alcohol, las drogas o el cigarrillo, pero que esta se da principalmente en los niños y jóvenes.