De los atacantes, algunas personas de la zona indicaron que estaban dotados con armas de corto alcance.
Pistoleros en moto le dispararon en dos ocasiones cuando salía de su casa en una invasión localizada cerca del hospital de San José.
El capturado tenía en su residencia una pistola calibre 9 mm e indumentaria militar. La Policía lo vincula con secuestros.
La droga, avaluada en $1.500 millones, estaba dentro de un parqueadero en el barrio Pastrana de Maicao.
Indican que el panfleto que circuló en Uribia fue para causar zozobra y temor, aunque dos de las personas que estaban en el listado fueron asesinadas.