Fue un gigante de las letras latinoamericanas, hermanado por siempre con Gabo pese a su distanciamiento, que nunca guardó silencio: ni literario ni político.
Como si se tratara de un libreto, estas tragedias siguen sucediendo, como si cada episodio no fuera suficiente para crear medidas regulatorias mucho más fuertes.
Nueva afrenta, mismo ejecutor. Se vuelve a equivocar el presidente, con su decisión de revanchismo político, de quitarle a la ciudad la sede de un foro global.
Cuando los recursos se invierten con transparencia y resultados visibles, la cultura tributaria crece y las ciudades pueden avanzar con respaldo ciudadano.
La propuesta del Ejecutivo para medir en las urnas el respaldo a sus reformas podría enrarecer aún más el clima de polarización política que envenena al país.