El 8 de marzo, diversas embajadas occidentales, incluida la de Estados Unidos, advirtieron a sus nacionales en Rusia sobre la posibilidad de atentados inminentes en el país, especialmente en grandes eventos en Moscú.
La Guardia Nacional Rusa (Rosgvardia) continúa buscando a los terroristas que atacaron la sala de conciertos con armas automáticas antes de una actuación del grupo de rock Piknik.
En su lugar, el alto tribunal concedió el amparo del derecho fundamental al debido proceso solicitado por el Club.
La Policía Metropolitana y la comunidad del barrio organizaron una eucaristía en memoria de los uniformados caídos en 2018. Familiares volvieron a pedir justicia.
De acuerdo con el negociador de paz del gobierno, el jefe del ELN calificó de 'noticia falsa' el informe y la carta en la que las autoridades advertían un supuesto plan de la guerrilla para atacar a la fuerza pública.