Solo bastará con alejarse de las luces artificiales y mirar al cielo para apreciar el fenómeno astronómico.
De acuerdo con expertos de la Universidad de Ginebra: “Su configuración es de especial interés para que los astrónomos ajusten modelos teóricos y sus nociones sobre la habitabilidad de un planeta”.
Tendría un tamaño estimado de entre 40 y 100 metros de ancho.
Los descubrimientos se han hecho gracias al Telescopio Espacial James Webb (JWST) y al Satélite de Sondeo de Exoplanetas en Tránsito (TESS).
Hasta 120 estrellas fugaces por hora lloverán sobre la Tierra durante el pico de la lluvia.