La inclusión de los Cuadros Vivos del municipio de Galeras, departamento de Sucre, en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad el pasado miércoles 4 de diciembre estuvo cargada de contrastes.
Mientras una delegación de los gobiernos nacional, departamental y municipal escuchó en vivo la inclusión de esta expresión artística y cultura en la decimonovena sesión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial en Asunción, República del Paraguay, por parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), en este poblado de la subregión Sabana sus habitantes vibraban de emoción en la plaza pública.
La alegría, dicen ellos, no les cabía y aún no les cabe en el pecho, pero más allá de ese jolgorio no se puede desconocer la preocupación que le asiste a Eligio Díaz Hernández, el director de la Corporación Mixta de Gestión Cultural que realiza el Festival Folclórico de la Algarroba y Cuadros Vivos, por el gran compromiso que asumen ante el mundo con un presupuesto ínfimo.
Y no es para menos, una expresión exaltada a nivel mundial solo tiene asignado, por parte de la Nación (Ministerio de las Culturas, los Artes y Saberes) en el área de estímulos, 21 millones de pesos para su realización, $14 millones menos que los que tuvo en esta vigencia cuando fueron 35 millones de pesos. El 90 % de los gastos de este festival, que llega a su edición 37 y que se realizará del 2 al 5 de enero del 2025, lo ha asumido la Alcaldía de Galeras, por lo que Eligio, que es además un gaitero de este pueblo, espera que la designación de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, que se registra justo 10 años después de haber alcanzado la nacional, se traduzca en cosas mejores para todos en procura de preservar una tradición muy antigua.
“Ser Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad es un orgullo inmenso que no se puede describir con palabras, es algo en lo que se ha venido trabajando desde que se creó el Festival Folclórico de la Algarroba y Cuadros Vivos en el año 1989 cuando se hizo la primera versión”, dijo Eligio Díaz Hernández y lo ratifica el también galerano y ex ministro de Minas y Energía de Colombia Carlos Martínez Simahán, que fue la persona que le dijo al entonces primer alcalde electo popularmente que debían crear un evento que preservara los Cuadros Vivos y que los diera a conocer ante el mundo, por eso al enterarse de que ya son Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad este destacado hijo de la también llamada tierra colorá solo atina a decir que él lo visionó.
“Siempre supe que cuando el mundo viera esta expresión artística que es única, de una belleza, audacia y sencillez que asombra, la iban a acoger como patrimonio y no me equivoqué”, dijo Carlos Martínez Simahán, quien de paso se encargó, de la mano de la cineasta Gloria Triana, de dar a conocer en Colombia esta tradición centenaria en la que en sus inicios solo se refería a lo religioso, pero que ahora plasma además otras realidades del mundo, de la cotidianidad, y lo mejor de todo es que es un espectáculo que de por vida ha vinculado a todo un pueblo. “No hay un galerano que no haya tenido participación alguna en los Cuadros Vivos. Me llena de alegría haber contribuido a sacarlos, mostrarlos al mundo”.
Mayor responsabilidad
Ser Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad implica, en criterio de Eligio Díaz Hernández, mayores responsabilidades porque van a tener los ojos del mundo puestos en lo que se ha denominado la galería de arte abierta más grande, por ello tienen previsto realizar para esta primera edición del 2025, que tiene carácter internacional, el Concurso Nacional de Cuadros Vivos en el que van a participar colectivos y creadores de todo el país.
“Es una categoría especial que se abre para que cada colombiano se apropie aún más de la manifestación Cuadros Vivos de Galeras. También vamos a rescatar el desfile de comparsas, en fin, esperamos realizar uno de los mejores festivales que se haya realizado en todas las versiones”, anota el director de la Corporación Mixta de Gestión Cultural Cuadros Vivos.
Si bien en el año 1989 fue que se realizó el primer festival, ya desde los años 20 en Galeras, siendo un caserío, realizaban Cuadros Vivos religiosos porque es una cultura española de la que los antepasados en Galeras se apropiaron y que en un principio tuvo como objetivo la religiosidad.
Salvaguarda
Si hay algo que los galeranos y en especial los hacedores del Festival Folclórico de la Algarroba y Cuadros Vivos en Galeras tienen claro es que con esta declaratoria de la Unesco necesariamente debe haber un plan de salvaguarda que refuerce el trabajo que desde las instituciones educativas tanto del área urbana como rural se viene realizando a través de la cátedra de artística y humanidades.
Desde la corporación también lo promueven y justamente acaba de finalizar un taller en la zona rural denominado Corregimiento Vivo, que tiene por objeto dar a conocer la historia de la tradición, su montaje, entre otros.
“Esperamos también que con la nueva declaratoria que es mundial nuestros Cuadros Vivos sean institucionalizados en el Ministerio de Cultura para que nos aporten los recursos necesarios para hacer el festival. Hay otros que no son patrimonio y sí están institucionalizados y reciben hasta 300 millones de pesos”, anotó Eligio Díaz Hernández.
En esto de la necesidad de salvaguarda de los Cuadros Vivos también coincide el creador y partícipe Arlin Ramos, conocido popularmente como Yito, que además se ha ido a formar en la academia, estudió artes escénicas, y ahora todos sus conocimientos profesionales los plasma en los Cuadros Vivos, pero reconoce que todo el que es nativo de Galeras está en condiciones de hacerlos porque es una tradición heredada y los niños desde muy pequeños son entrenados para ello.
“La mayoría son empíricos, pero aquí en Galeras cualquiera puede ser creador de Cuadros Vivos, incluso son profesionales en otras áreas del conocimiento y también crean y son dioses (protagonistas) en los cuadros”, dice Arlin Ramos, quien como experto ahora le da otros manejos a esta manifestación cultural.
Advierte que la declaratoria de la Unesco le imprime más responsabilidad al trabajo a desarrollar porque el público va a tener más expectativa.
Aclara que la inspiración del creador de Cuadros Vivos está presente y encendida los 365 días del año y en desarrollo del Festival de la Algarroba se ve el resultado en tan solo 120 minutos o quizás menos.
“Esta declaratoria es el premio para un pueblo dedicado a ello, que siempre ha trabajado por esta tradición. Lo esperábamos y el tiempo de Dios es perfecto”, anota Arlin Ramos, que para este 2025 también expone su cuadro vivo y anhela que se pueda incluir la categoría rey de reyes con todos los ganadores.
Edwin Payares Junieles, otro creador de Cuadros de Vivos, que es empírico, lleva 30 años dedicados a esta manifestación cultural en la que se inició como dios y con el tiempo se convirtió en creador.
Aduce que la nueva declaratoria lo llena de orgullo a él y a sus generaciones, y ya está listo para mostrar en la nueva versión del festival lo mejor de las costumbres de su pueblo que fueron elogiadas internacionalmente. Sus cuadros están basados en lo tradicional, en la vivencia del ser galerano.
Tres noches de exposición de cuadros
Por cada noche del Festival de la Algarroba y Cuadros Vivos son expuestos 25 de ellos que visten la calle de un barrio escogido, por lo que en 3 noches hay 75 cuadros, de los cuales 15 se disputan los 5 primeros lugares que son premiados con algo de dinero.