Nicolás Monterroza García dejó a un lado el ver televisión, estar en clases, jugar y hasta tocar guitarra para internarse por unas horas en el mundo policial que tanto le apasiona.
Vestido de verde oliva y con el grado de intendente el niño se le presentó en la Escuela de Carabineros Rafael Núñez, en la ciudad de Corozal, al comandante de la Policía en Sucre, coronel Juan Carlos Ramírez Chávez, quien lo esperó para chocarse los puños de las manos y sobrevolar la capital sucreña donde él reside.
El encuentro de Nico --como cariñosamente lo llaman-- con el coronel y demás uniformados de la institución fue algo normal en él, tanto que el saludo militar o marcial que consiste en llevar la mano derecha con los dedos juntos hacia la sien o a la visera de la gorra estuvo a flor de piel.
Lo ha aprendido viendo programas en televisión. A propósito su favorito es paw patrol.
'Cómo está mi comandante', 'buenas mi comandante', 'chao mi comandante', son las expresiones con las que Nicolás se dirige a los policías cuando los ve. Asegura que ellos son unos súper héroes y por eso quiere ser como ellos.