A través de un comunicado a la opinión pública conocido 24 horas después de haberse registrado la entrega de un cadáver para su sepultura a una familia sincelejana que no le correspondía, la Clínica Especializada La Concepción S.A.S. dice que no es su responsabilidad y ante ello se abstiene a pronunciarse sobre el caso.
En el escrito, firmado por el gerente general Guillermo Ruiz Vergara, dice que 'es importante precisar, que, retirado los cadáveres debidamente identificados, de las instalaciones de esta institución, el manejo y disposición final de dichos, es competencia de la funeraria, entidad que se encarga del proceso de inhumación (entierro) o cremación del cadáver, no siendo posible que nos pronunciemos frente al error en la entrega de los restos mortales'.
Ante esto la Funeraria La Esperanza a través de un comunicado firmado por el gerente Carlos Alberto Ángel Ochoa, hace saber que la responsabilidad de esta y de cualquier otra funeraria en estos tiempos de pandemia por la COVID-19 no es la de identificar y embalar al fallecido eso lo realiza el ente de salud donde se produce el deceso y así lo estableció el Ministerio de Salud.
Las funerarias reciben el cadáver debidamente embalado y rotulado, y para este caso la misma familia de la señora Georgina Álvarez hizo un video la tarde del martes en el cementerio, en el que es evidente que el cadáver que a ellos les entregaron en la morgue de la Clínica La Concepción tenía un papel con el nombre de la señora Georgina Álvarez, y peor aún, escrito con marcador sobre una de las bolsas estaba el nombre de Rosa Huertas, es decir, que el cadáver que estaba embalado no correspondía a ninguna de las dos mujeres fallecidas porque era el de un hombre.
Esto contrasta con las imágenes que la Clínica La Concepción envió a este medio a través de otro video en el que se ve una bolsa con el nombre de la señora Georgina escrito con marcador de color negro.'… una vez presentado el fallecimiento de la usuaria realizamos oportunamente el reporte a todos los actores que intervienen en la gestión del cadáver (funeraria y Secretaría de Salud) y a sus familiares, de manera responsable, clara y oportuna, cumpliendo siempre con el respeto a la dignidad humana. Posteriormente, con las medidas de bioseguridad y el uso de elementos de protección personal de acuerdo a lo establecido en el protocolo, se coloca el cadáver en doble bolsa específica para cadáveres, así́ mismo, se realiza la desinfección de la bolsa previamente al traslado según se indica, se rotura la bolsa y es trasladado internamente al depósito temporal de cadáveres, donde es retirado por el personal del servicio funerario', dice el médico Ruiz Vergara.
La Clínica, de donde hace varias semanas se fugó un paciente con la COVID-19, lamenta en el comunicado los hechos sucedidos.
La Personería les pide cuentas
Ante esto el personero de Sincelejo, Jesús Valverde, que se puso al frente de la situación desde la tarde del martes, requirió a la Clínica La Concepción para que entregue un informe detallado de los lamentables hechos, al igual que a la Funeraria La Esperanza.
'Hay que establecer las responsabilidades y saber de quien fue realmente la culpa. Esperamos dar con la verdad para resarcir de manera mínima el dolor causado a esta familia', dijo el Personero ratificando con ello los problemas que se están registrando en clínicas, hospitales y en las EPS.
