Por disposición de la circular 007 de la Policía Nacional, el Comando de la Policía en Sucre adoptó desde principios de la cuarentena el aislamiento de grupos conformados por un promedio de 200 uniformados de todas las especialidades, esto con el fin de prevenir la propagación de la COVID-19.
Los agentes demoran en sus casas un promedio de 14 días haciendo teletrabajo y con la disponibilidad al cien por ciento. Cada grupo corresponde al 20 % de la oferta de policías que hay en el departamento. A esto le denominan normalmente como Aislamiento Preventivo Obligatorio, pero en la institución lo manejan como reserva estratégica.
'Nos toca cambiar el chip. Uno de los primeros ejercicios fue el de implementar las normas de bioseguridad con gafas, tapaboca y guantes. Una de las cosas más importantes: no hay formaciones. El Policía llega, hace su relevo y sale. En las motos no van dos uniformados sino solo uno', indicó el comandante de la Policía en Sucre, coronel William Rincón Zambrano.
Así mismo, el oficial informó que han tenido que practicarle pruebas de COVID-19 a dos uniformados para descartar el virus, debido a que estuvieron en contacto con presuntos casos de enfermos en el departamento. Sin embargo, resultaron negativas.
'Todos los policías nos hacen falta y todo el mundo reclama más policías. Pero con los que tenemos hemos sabido solventar. Sin embargo, hay varias personas que no son conscientes de lo que están pasando. Uno de ellos son los que siguen consumiendo alcohol', dijo el comandante.
