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El alcalde de Coveñas, Nilson Manuel Navaja Olivares, y la interventora Zaelis María Buelvas Tobío, no aceptaron los cargos que la Fiscalía de Sincelejo les imputó ayer.

Se trata de contratos sin el lleno de los requisitos de ley en concurso homogéneo y sucesivo, peculado por apropiación en favor de terceros y falsedad en documento público, que para el caso del mandatario fue en calidad de coautor.

El ente investigador le reprocha a Navaja Olivares el haber liquidado un contrato que no se ejecutó y a la interventora de rendir informes que no eran ciertos.

Además, dijo la Fiscalía, que el contrato en su encabezado se refiere a la implementación de un programa de bilingüismo, como política pública, pero en el objeto se detalla que es para promover y promocionar hábitos de vida saludable firmado con una entidad sin ánimo de lucro de nombre Fundación Integral Nueva Esperanza.

No tiene experiencia

De esta última, que tiene como representante legal a Luisa Núñez Reyes, la Fiscalía anotó que no tiene ninguna experiencia en bilingüismo y por ser una entidad sin ánimo de lucro no tenía por qué recibir las ganancias que obtuvo y que fueron por el orden de los $288 millones, dineros últimos que fueron los que pagó el alcalde de la totalidad del mismo que fue de $2.277 millones.

El peculado por apropiación a favor de terceros favoreció a Núñez Reyes a través de su fundación, que dijo tener convenio con una entidad internacional que sería la que entregaría las certificaciones de unas capacitaciones en inglés que no se cumpliero, situación que corroboró la Sijín con las entrevistas a rectores, coordinadores académicos y docentes de los colegios de Coveñas.