El sacerdote Édgar Salcedo Manjarrez pidió este Jueves Santos a la comunidad católica de Santiago de Tolú 'no callar ante la injusticia y la maldad del mundo'.
El párroco siguiendo los pasos a Jesús lavó los pies en medio de la eucaristía a 12 nazarenos.
En medio de la homilía ofrendó la sangre del sacerdote Fernando Meza para la paz y la justicia en Sucre.
De igual forma recordó el martirio de los otros dos sacerdotes en Sucre.