Una enfermedad crónica acabó con la vida de Miguel Ángel Díaz, hijo de Diomedes Díaz, tras una dura y larga batalla por detenerla. Sin embargo, el pasado 18 de enero falleció en la Clínica Méderi. Luego de su deceso su hermano, Rafael Santos, que solo días antes lo había ido a visitar, se mostró triste por su partido.
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Fue a través de sus redes sociales por donde el artista de música vallenata dedicó unas sentidas palabras en despedida a su hermano que iba deteriorándose desde hace varias semanas, pese a los esfuerzos de los médicos que lo trataron.
“‘Migue’, ¡hermano de mi alma! Vuela alto hasta donde nuestro señor Jesucristo. Él te recibirá porque ¡fuiste un alma buena y noble! Yo te recordaré con la alegría que te caracterizaba y porque ¡pudimos disfrutar siempre que nos veíamos!”, escribió Rafael Santos poco tiempo después que se supo la noticia.
Y agregó: “Fuimos hermanos que se amaron con ¡mucho amor y respeto! Le doy gracias a Dios por darnos un hermano como lo fuiste tú te amo y te amaré por siempre hermanito DESCANSA EN PAZ”.
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El mensaje vino acompañado de un video de ‘Migue’ entonando ‘Mi ahijado’, canción de la autoría de su padre, en una parranda vallenata en la que ambos cantan. Coincidencialmente el tema musical habla sobre la partida de un compadre que deja a un hijo con su padrino devastado por su partida.
Hace solo tres días, el intérprete de ‘Locamente enamorado’ visitó a Miguel Ángel en la clínica donde se encontraba hospitalizado luego de haber despertado de una sedación a la que fue sometido debido a una peritonitis.
“Hoy estuvimos visitando con mi esposa a mi hermano querido Miguel Ángel Díaz Hicimos una oración de fe porque todo está en manos de Jesucristo y con fe sabemos que Jesucristo va a obrar en él”, indicó en su momento el cantante vallenato junto a una fotografía con su hermano postrado en una cama visiblemente débil.
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Y es que Miguel Ángel enfrentó problemas de salud desde su infancia y a los 20 años fue diagnosticado con una enfermedad terminal que lo llevó a perder ambos riñones y depender de diálisis.
Debido a esto último, en un conmovedor acto de amor y solidaridad, su madre, Yolanda Rincón, le donó uno de sus riñones, lo que le permitió mejorar su calidad de vida durante 12 años. No obstante, a finales de 2023, su estado se agravó al fallar el órgano trasplantado, lo que lo obligó a retomar las diálisis.
En octubre de 2024, su situación se complicó aún más debido a la formación de trombos en su pierna derecha, lo que derivó en la amputación de la extremidad mientras estaba en coma. Además, desarrolló una peritonitis que obligó a los médicos a intubarlo nuevamente. Aunque logró despertar brevemente el pasado 15 de enero, su salud continuó deteriorándose.
