Compartir:

En medio de un trabajo para el programa ‘Séptimo Día’, del canal Caracol, la periodista Laura Hincapié fue agredida por un hombre que supuestamente se hacía pasar como veterinario en la ciudad de Cali.

Leer más: Anamar, del Desafío 2024, denunció que fue víctima de agresión por parte de Renzo

De acuerdo con el informe realizado por Hincapié, el falso veterinario, identificado como Miguel Ángel Parrado Amado, está acusado por la muerte de varios animales, por lo cual las autoridades adelantan investigaciones en su contra.

Al parecer, Parrado es propietario de un centro médico para animales, a pesar de no tener ninguna preparación profesional para ejercer como veterinario, lo que ha generado diferentes denuncias por parte de los dueños de las mascotas que han fallecido tras recibir su atención.

Ante los señalamientos, Hincapié decidió visitar al supuesto veterinario para conocer su versión; sin embargo, tras realizarle algunas preguntas respecto a las supuestas irregularidades en torno a su preparación como médico de animales, el sujeto se tronó agresivo.

No olvide leer: Video: mujer se hace viral al salir de compras a un centro comercial con sus cuatro robots humanoides

Lea también: Tenga en cuenta estas recomendaciones para evitar estafas virtuales en la época decembrina

En la grabación compartida por el programa, se ve el momento en que Parrado le quitó a la fuerza el micrófono al sonidista, para luego destrozarlo; acto seguido empezó a golpear las cámaras, por lo que Hincapié decidió retirarse del lugar.

“Vámonos, vámonos”, dijo la periodista visiblemente asustada. Luego expresó: “nos acaban de agredir acá, nos acaban de agredir”.

De acuerdo con la periodista, ella y su equipo permanecieron retenidos por más de 20 minutos, hasta que llegaron al lugar unidades de la Policía Nacional para conocer lo que sucedía.

No olvide leer: Alertan sobre papas que estarían contaminadas y podrían provocar una intoxicación: ¿Qué se debe revisar?

En medio de la inspección realizada por las autoridades, se evidenció que el establecimiento no contaba con la autorización necesaria para su funcionamiento, lo que generó que se realizará el respectivo cierre.

Además, en el lugar se hallaron medicamentos vencidos que, al parecer, eran suministrados a los animales.