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Recientemente, EL HERALDO le preguntó a la Inteligencia Artificial cuál considera es el mejor vallenato de la historia, y esta luego de hacer un Top 10, en el que se encuentran destacadas letras interpretadas por figuras como: Alfredo Gutiérrez, Diomedes Díaz, Carlos Vives, Rafael Orozco y Silvestre Dangond, decidió que la mejor es La gota fría.

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Se trata de la piqueria más famosa del mundo vallenato, la cual fue creada por Emiliano Zuleta Baquero, El Viejo Mile, en 1938, luego de una famosa controversia con el también juglar Lorenzo Morales.

Inicialmente fue interpretada y grabada a mediados de los años 1940 por Guillermo Buitrago con el título de Qué criterio y se ha convertido desde entonces en uno de los temas más populares del folclor colombiano.

En 1976, la agrupación El Doble Poder, conformada por Daniel Celedón, voz líder, e Ismael Rudas, acordeonero, grabaron la que fue por años la versión más famosa y fiel al folclor vallenato de La gota fría, solo superada en popularidad por el fenómeno comercial de Carlos Vives en 1993. También la grabó El Binomio de Oro de América. Otra de las versiones más relevantes es la versión salsa del Grupo Niche. Esta versión tuvo una notable proyección al aparecer en la película La virgen de los sicarios (2000). En 1998, el español Julio Iglesias grabó una versión de la canción, lo cual la popularizó en algunos países fuera del mundo de habla hispana, sobre todo en Europa.

¿Cuál es el origen?

La canción es un fiel ejemplo de la piqueria, que en el vallenato es un duelo o pique entre dos o más verseadores, usualmente realizado en medio de una parranda vallenata.

La canción surgió de una controversia y rivalidad entre el máximo representante del vallenato en el departamento de La Guajira, Emiliano Zuleta Baquero, y su similar en el departamento del Cesar, Lorenzo Morales, ya que ambos sentían celos del otro y competían por ser considerados como el mejor acordeonero, pero además en composición y canto.

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Zuleta y Morales se conocieron en la población de Guacoche, cuando Zuleta viajaba de La Guajira hacia Valledupar. Estando en Guacoche, Zuleta vio a Morales interpretando el acordeón y pidió que se lo prestara para demostrar su destreza. Tras interpretar varias canciones e impresionar a los asistentes, Morales se sintió disminuido por el talento de Zuleta y le arrebató el instrumento musical, lo que Zuleta interpretó como un “rechazo”. Zuleta regresó a Valledupar y compró un acordeón para regresar a Guacoche y seguir de parranda con sus amigos y retar con su presencia a Morales, pero este había partido a la población vecina de Los Corazones.

Desde Guacoche, Zuleta fue a la población de La Jagua del Pilar, en La Guajira, donde empezó a cantar versos sobre lo acontecido con “Moralito”, dando origen a parte de lo que se convertiría en la canción La gota fría. Moralito y Zuleta formaron así una rivalidad musical en medio de la parranda vallenata, volviéndose buenos amigos, pero al mismo tiempo compitiendo en medio del pique.

Por este primer encuentro entre Zuleta y Morales quedó grabado en la canción que en uno de sus estribillos dice así: “Moralito Moralito me decía que él a mí, que él a mí me iba a ganar y cuando me oyó tocar le cayó la Gota Fría y al cabo e la compartía el tiro le salió mal”.

Se acordó un duelo musical durante una parranda en la población de Urumita, en el que empezó tocando Zuleta, quien terminó aclamado por el público; ante este hecho, Morales se retiró sigilosamente del evento, aduciendo un repentino malestar. Como represalia por no cumplir con el reto, Zuleta le compuso La Gota Fría, haciéndolo quedar en ridículo en toda la región. Pocos años después terminó la rivalidad, y Morales y Zuleta se convirtieron en grandes amigos hasta la muerte de este último en 2005.

Según el folclorista Ricardo Gutiérrez, el nombre de La gota fría fue puesto por Zuleta tras un dicho de su madre Sara Baquero, “La vieja Sara”, quien decía que en la población de Tunja había una cárcel, con una celda en la que había una gotera y al preso de la celda le caía la gota fría.

Otra versión sostiene que el título del tema alude de manera metafórica al fenómeno meteorológico del mismo nombre, en el que un frente de aire frío choca con aire cálido, produciendo fuertes tormentas y lluvias torrenciales; la gota fría ocurre de forma periódica en las cercanías de la Sierra Nevada de Santa Marta.

Julio Oñate Martínez, compositor y estudioso del folclor, contó a EL HERALDO que aquello se dio sin premeditación alguna. ‘Los músicos se desplazaban de un lugar a otro con el ánimo de mostrar sus aptitudes y cantos, y siempre encontraban un ‘gallo’ que también cantaba, y cada uno trataba de mantener su jerarquía’.

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“Emiliano vivía en La Jagua del Pilar (La Guajira) y se dirigió a Valledupar en compañía de dos amigos, con el fin de comprar un acordeón. Caía la tarde y al pasar por Guacoche escucharon un repiqueteo de caja en la distancia y con la natural curiosidad se acercaron hasta donde estaba el tropel. En la sala de una modesta vivienda un grupo de entusiastas bebedores parrandeaba con el acordeón de Morales, que llamó poderosamente la atención del Zuleta”, explicó.

“Cuando Emiliano terminó de tocar le dieron el primer trago a él, se estilaba en la época que cuando había una parranda en la provincia, el primer trago era para el acordeonero, segundo para el cajero y tercero para el guacharaquero, así estuviera el más rico del pueblo o el alcalde, era a los músicos en ese orden a quienes se les brindaba el primer trago, entonces Morales se disgustó porque él era el dueño de la parranda, y le dieron el trago de la tanda al forastero; le quitó el acordeón a Emiliano y lo botó de donde estaba; Zuleta se fue disgustado y empezó la cosa”, relató Oñate.

“En adelante, cada vez que Emiliano parrandeaba en su región siempre improvisaba versos hirientes contra Morales. Los viajeros que los escuchaban se encargaban de contárselo a Lorenzo Miguel, quien, de igual forma, le enviaba con los lleva y trae, versos de alto calibre”, afirmó el investigador musical.