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La sostenibilidad, más allá de ser un tema de debate en los paneles de conservación del medioambiente, se ha convertido en la meta no solo de las marcas, sino que ha sido tomada, en muchas ocasiones, como emblema de los consumidores alrededor del mundo.

Cada vez son más las opciones que aparecen en el mercado para reemplazar elementos contaminantes, tanto en los procesos de producción, empaques y productos finales que llegan para el uso de los clientes.

A este movimiento transnacional de repensar la conciencia ambiental y optar por alternativas amigables con el medioambiente, también se suma la industria de la moda.

Esta, en particular, se posiciona como la segunda industria más contaminante del mundo, después de la petrolera, y tiene una producción 400 veces mayor a la de hace 20 años.

Según Ecoalf, empresa líder en el mercado de moda sostenible en Europa, el 63 % de estos productos terminan en lugares que hacen del ecosistema un basurero de ropa sucia y desechada.

Frente al exponencial crecimiento de esta problemática, diseñadores y fabricantes de diferentes partes del mundo y en especial de Colombia, han comenzado a trabajar para avanzar hacia una moda ecológica, impulsados también por clientes que toman uso de su conciencia ambiental. Actualmente, en Colombia existen varias marcas de indumentaria, accesorios y decoración interior que le están apostando a crear iniciativas dirigidas al slow fashion, que sean más comprometidas con lo que la naturaleza pide en cuidado y conservación.

Eco-Diseños inspirados en el Caribe colombiano

‘Soy de Tierra’ es una marca de moda conformada por una pareja de novios caribeños. Carlos Parra es fotógrafo documental barranquillero y Alejandra Restrepo, diseñadora de modas valduparense. Para ellos, su firma de estilismo se proyecta como un llamado a las prácticas amigables con el medioambiente, además de la reinvención de la moda no solo a partir de lo estético, sino también de lo ético. 'La inspiración realmente proviene del entorno. Todo lo que nos rodea y las preguntas que me surgen hacia el cuidado del medioambiente las anotamos en un papel para luego responderlas desde el diseño y lo audiovisual', comentó Parra.

La pareja coincide en que la inspiración para crear ‘Soy de Tierra’ surgió cuando descubrieron la historia de Noah Sealth, un jefe indio norteamericano que en 1854 respondió a la propuesta del entonces presidente de Estados Unidos, Franklin Pierce, en la que pretendía despojar a estas comunidades de sus tierras.

A esto, Sealth, como jefe de la tribu, responde con lo que se considera el primer manifiesto en defensa del medioambiente diciendo: 'El hombre no es dueño de la Tierra, él hace parte de ella'.

Esta última frase fue la que Alejandra y Carlos conservaron para emprender su proyecto de ecodiseño. 'Nosotros con ‘Soy de Tierra’ no hacemos moda sostenible, porque sostenible significa que los procesos son duraderos. Nosotros desarrollamos ecodiseños, porque estos no le hacen daño al medioambiente', añadió Alejandra.

Actualmente, ‘Soy de Tierra’ acaba de lanzar al mercado su primera colección de accesorios, un bolso hecho a base de madera reutilizada del árbol de cañahuate, muy sembrado en Valledupar.

‘Semilla’ es el nombre que lleva este accesorio y evoca la preocupación por el aumento de la deforestación, además de mostrarse como la gestación de un trabajo hecho por manos artesanas del taller ‘Selva Africana’ de Galapa, Atlántico. Este árbol sirve como inspiración para la creación de piezas únicas y cargadas de identidad Caribe.

Una colección hecha con hilos reciclados

La moda consciente sigue tomando nuevos espacios y en esta ocasión trasciende a la indumentaria y los accesorios para enfocarse en el diseño interior. La reconocida diseñadora de modas, Olga Piedrahita en conjunto con Lafayette, empresa textil colombiana que celebra 80 años de su fundación, lanza su nueva colección llamada ‘Rupestre’ que se destaca por contar con hilos reciclados a base de botellas plásticas. 'Trabajar en esta colección ha sido un ejercicio maravilloso, en el cual hemos logrado combinar la perspectiva de la nueva era de consumo y a su vez una búsqueda por ser más sostenibles a través de la producción local de bajo impacto, uso de materias primas recicladas y productos textiles amigables con el medioambiente'.

Con textiles para la decoración e interiorismo ‘Rupestre’ se destaca por presentar textiles de autor que cuentan con diferentes estampados que buscan resaltar el talento local con técnicas artesanales hechas a mano, apoyando así el desarrollo de las regiones.

La inspiración para esta colección conjunta proviene de la tendencia ‘Tótem’ para la temporada 2022-2023 y tiene como eje central el localtivismo y el consumo responsable, conceptos que emergen de una cultura ancestral, evocando el origen y planteándose las preguntas de dónde viene y hacia dónde va la humanidad. 'Este trabajo lo hicimos en conjunto también con Isabel Gómez Machado, Ilustradora independiente y quisimos llevar esta fantasía de lo neolítico a la sostenibilidad en procesos amigables con la naturaleza y el reciclaje'.

Este lanzamiento entrega al mercado textiles aterciopelados e hipertáctiles, con una paleta de color comprometida con la sostenibilidad, estampados artesanales y pintura rupestre para la decoración e interiorismo por medio de cinco microcolecciones: decorativos, hilos reciclados, Paraíso V, tapicería y cartonería.

'Este lanzamiento tiene dos componentes muy importantes. Es la primera vez que lanzamos diseños de autor para el mercado de la decoración y la segunda, que invertimos en temas de sostenibilidad', comentó Santiago Escobar, subgerente Unidad Deco.

Una reina en esta onda

La señorita Colombia 2015, Andrea Tovar Velásquez, acaba de lanzar su nueva marca de ropa, Varto, prendas que además de reflejar la cultura y arte colombiano, también son amigables con el medioambiente.

'Soy muy perseverante y creo que no me doy por vencida con los sueños. He tenido restaurantes, spa de pestañas y ahora quiero tener ese sello propio de la mujer latina. Me estoy metiendo y aprendiendo mucho del mundo de la moda', dijo.

Tovar también reveló que el nombre de su marca de ropa es su apellido al revés: 'quería algo mío, que dejara una huella, algo sostenible y sustentable'.

Destacó que su colección cuenta con elementos naturales, especialmente aquellos que tienen que ver con la pintura, hilos y algunas figuras decorativas hechas a base de materiales reciclabes. 'Es un momento de reconciliación con el planeta y nuestras telas no tienen desechos tóxicos', mencionó.