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Una voz que interpretó la canción ‘Triste recuerdo’ de Antonio Aguilar hizo que Andrés Cepeda, Jesús Navarro y Natalia Jiménez voltearan su silla y le dieran un sí a María Liz Patiño, ‘La princesa del sentimiento’.

La menor de 12 años, que nació en Soledad, Atlántico, hizo su presentación en el programa musical del canal Caracol La Voz Kids, este jueves. Con un atuendo rosa de los pies a la cabeza, un sombrero y botas del mismo color, y una interpretación de canto con acordeón, María Liz encantó a los jurados. Cepeda, Navarro y Jiménez la querían tener en su equipo, pero finalmente ella se decidió por la cantautora española.

Precisamente, el talento y carisma de ‘La princesa del sentimiento’ que cautivó en La Voz Kids, fue motivo para que EL HERALDO exaltara en el Día de los Niños, las habilidades musicales que tiene María Liz. Ella fue una de las protagonistas de ‘Niños visionarios: con sus talentos lo pueden todo’.

¿Quién es María Liz Patiño?

Esta Casa Editorial conoció que María Liz Patiño Castro vive en el barrio Viña del Rey, en Soledad y estudia en la Institución Educativa Bicentenario, en su municipio. Además, que la niña aprendió empíricamente a tocar más de 11 instrumentos musicales como el requinto, piano, guitarra eléctrica, acústica, el cuatro, la batería, la guacharaca, la caja, las maracas, el violín, el acordeón, el bajo y el ukelele.

En su casa creó Mi Escuelita Musical, un espacio en el que les enseña a los niños de su barrio a tocar los aparatos sonoros. 'Mi Escuelita Musical nació hace cinco años. A mí se me ocurrió porque acá en el barrio muchos niños de mi edad están fumando, consumiendo droga, robando, las niñas ya están embarazadas y mi proyecto es con el fin de que ellos en su tiempo libre tengan algo en qué pensar, que sea productivo y mantenerlos ocupados', dijo María Liz.

Gracias al apoyo de sus padres en su vocación musical, como contó la pequeña artista, ha podido sacar adelante su escuelita y también seguir tocando y cantando. En su casa tiene un estudio que su papá acondicionó poco a poco, para que ella pudiera producir su propia música. En conversación con EL HERALDO, el progenitor de la menor contó que es vendedor ambulante y que con 'mucho esfuerzo' ha sacado adelante a sus hijas.

'El piano y la batería los cogí y los fié, lo fui pagando y así prácticamente con todos. Entonces ella ahora graba canciones y como pude le compré un computador de segunda, luego una tarjeta de audio y así le armé acá en la casa un estudio, no está tan bien acondicionado, pero aprendí de albañilería y yo mismo le enchapé el piso, le puse el cielo raso y todo eso. Cuando uno tiene un hijo con un sueño hace de todo'.

Ambos, su mamá y su papá, la acompañaron en la audición y, desde el principio, derramaron lágrimas de orgullo al ver cantando a su hija.