Natasha Coates es una joven británica que, cuando tan solo tenía 20 años de edad, se enteró de que padece un extraño síndrome que pone su salud en riesgo constantemente y le impide llevar su vida con normalidad. A pesar de ser tan joven y enérgica, esta mujer tiene prohibido experimentar mucha alegría, tristeza o enojo, pues cualquier emoción fuerte podría conducirla a una muerte inminente.