Antes de ser elegido como presidente de la Cámara de Representantes, el congresista David Racero, develó algunas de las primeras medidas a tomar en el próximo periodo legislativo; entre ellas, revisar la cantidad de privilegios otorgados a los congresistas.
El congresista por el Pacto Histórico aseguró en su momento que analizará los millonarios contratos de alquiler de camionetas blindadas, las cuales son entregadas a los congresistas del país, y que cada una representa un costo de aproximadamente 11 millones de pesos mensuales.
Esta revisión incluiría determinar cuáles legisladores sí requieren la protección de las camionetas blindadas, y aquellos que no, los vehículos deberían ser reasignados a líderes sociales amenazados.