El denominado voto de opinión fue el gran ganador en las principales capitales y departamentos del país en las elecciones regionales: los movimientos independientes y la Alianza Verde, por sí mismos o en coalición, no solo ganaron varias plazas (15 en alcaldías y 10 en gobernaciones), sino que se las arrebataron a los partidos tradicionales y a quienes se esperaba ganaran más puestos: el uribismo, como partido de gobierno, y el petrismo, fuerza opositora que obtuvo 8 millones de votos en las presidenciales.
Las alcaldías
En plata blanca, los números arrojan que en alcaldías de ciudades capitales, los movimientos independientes se alzaron con ocho propias, seguidos de los verdes con cinco propias y dos en coalición, Cambio Radical con cuatro y tres, los liberales con tres y cuatro, los conservadores con tres y tres y la ASI con tres propias y dos en coalición.
Les siguieron Aico con dos propias y tres en coalición, La U con una y tres, Colombia Renaciente con una y dos, el Mais con una y una, el Polo con una y una y finalmente el Centro Democrático con una alcaldía en coalición.
Las gobernaciones
En gobernaciones lideró Cambio Radical con cinco propias y 11 en coalición, seguido de los conservadores con seis y seis, los movimientos independientes con seis propias, los liberales con cuatro propias y 11 en coalición, el Centro Democrático con cuatro y dos y La U con tres propias y 11 en coalición.
La ASI, entre tanto, obtuvo dos propias y seis en coalición, el Mais cinco en coalición, Colombia Renaciente cinco en coalición, los verdes una propia y dos en coalición, Aico una y una, Colombia Justa y Libres dos en coalición y por último Colombia Humana se quedó con una gobernación en coalición.
Los partidos
Aunque los independientes fueron el ‘palo’ de los comicios, algunos partidos tradicionales reclamaron sus victorias.
Cambio Radical emitió un comunicado en el que celebra los resultados: 'Es sin duda consecuencia al trabajo que por años este partido ha realizado con esfuerzo y dedicación, demostrando con hechos que sí ejecutamos y le cumplimos a los colombianos', dijo el director de la colectividad, Germán Córdoba.
A su vez, el Partido Conservador señaló que triplicó sus gobernaciones y alcaldías de ciudades capitales: 'Seis candidatos conservadores para gobernación, en los departamentos de Tolima, Guaviare, Bolívar, Caquetá, Norte de Santander y La Guajira, frente a dos gobernaciones obtenidas en el 2015. Así mismo, en las ciudades capitales de Montería, Ibagué, Quibdó y Tunja, al pasar de dos capitales obtenidas en el 2015'.
Entre tanto, el Partido de la U aseguró que duplicó sus votos en las regionales y duplicó también sus gobernaciones: 'El trabajo de recomposición regional, diálogo con las bases y un mensaje con ideas y sin odio, ni polarización, logró calar en los colombianos. La U ganó Valledupar, Montería y Cali en coalición', afirmó Aurelio Iragorri Valencia, director del partido.
Ciudades principales
En Bogotá se disputaban el fortín electoral cuatro fuerzas: el petrismo que siempre ha sido sólido en la capital, el uribismo que se reivindicó en las presidenciales, los verdes de Antanas Mockus y los independientes de Carlos Fernando Galán. Los ganadores fueron los verdes de Claudia López, la primera alcaldesa mujer de Bogotá y la primera alcaldesa Lgbt de una ciudad capital del continente americano, quien se alzó con el 35,24% de los votos, es decir 1.088.869 sufragios, y quien además se acompañará de una fuerte bancada verde en el Concejo.
En Medellín le ganó al tradicionalmente paisa Centro Democrático el candidato independiente y exviceministro de las Tic, Daniel Quintero Calle, con el 38,49% de los votos. No pudo ganar en la capital antioqueña el uribista Alfredo Ramos, hijo del exgobernador Luis Alfredo Ramos. Y la gobernación de Antioquia, con el 36,04% de los sufragios, la sacó Aníbal Gaviria, con una coalición de liberales, Cambio Radical y La U.
En Cali se impusieron igualmente los verdes y los liberales con Jorge Iván Ospina, con el 38,04% de los sufragios. Y en el Valle del Cauca, con el 56,14% de los votos, ganó Clara Luz Roldán, candidata de la coalición de liberales, La U y Cambio Radical.
En Bucaramanga se llevó la alcaldía, con el 48,36% de los sufragios, Juan Carlos Cárdenas Rey, de los verdes y candidato del renunciado exalcalde Rodolfo Hernández. Del mismo modo, en la gobernación de Santander, con el 35,63% de los votos, ganó el clan Aguilar con Mauricio Aguilar, por los conservadores.
Los verdes también obtuvieron victorias en Cali, Manizales, Villavicencio, Bucaramanga y Cúcuta.
Implicación en lo nacional
Los resultados de la nueva recomposición regional tendrán efecto sin duda en las presidenciales de 2022 o, al menos, permiten reflejar los poderes que estarán tras los presidenciables. En el Atlántico y Barranquilla, con poderosas votaciones, las elecciones de Elsa Noguera y Jaime Pumarejo ubican nuevamente al alcalde de la capital atlanticense, Alex Char, en el partidor presidencial, no solo por su fuerza en el Caribe, su popularidad en las encuestas, el reconocimiento como buen ejecutor y el apoyo de Cambio Radical –que ya pareciera haber restaurado sus fisuras de meses atrás-, sino porque también el charismo contó con una amplia coalición de fuerzas nacionales: uribismo, liberalismo, conservatismo, La U y Mira.
Pero el mapa del poder de independientes y verdes en el país también pone como un serio aspirante a la Casa de Nariño a Sergio Fajardo, quien apadrinó la carrera a la alcaldía de Claudia López en Bogotá, fue candidato presidencial en 2018 y fue reconocido por sus buenos resultados como alcalde de Medellín y gobernador de Antioquia.
Así las cosas, con la fuerza que se supone tendría en tierras paisas y con la recién lograda plaza de Bogotá, en caso de que se le endosen los sufragios de López, es uno de los presidenciables seguros.
La derrota de Uribe y Petro
Analistas coinciden en que dos de los grandes perdedores, precisamente porque suelen ser grandes electores, son el expresidente y senador del Centro Democrático, Álvaro Uribe, y el excandidato presidencial y senador de Colombia Humana, el cordobés Gustavo Petro.
El primero lo reconoció y el segundo lo discutió, y ambos lo hicieron en Twitter. Y aunque las fuerzas que lideran son relativamente nuevas: el Centro Democrático, que nació en oposición al expresidente Juan Manuel Santos y la Colombia Humana, que es la continuación de la Bogotá Humana, lo cierto es que se esperaba un mayor poder de ambas en estos comicios que pasaron, porque Uribe fue presidente dos veces, puso a Santos, ganó con el ‘No’ en el plebiscito y luego puso a Duque, además de que tenía el partido de gobierno, y porque Petro obtuvo 8 millones de votos en las pasadas presidenciales, lo que se suponía lo consolidaba como el líder de la oposición en el país.
El uribismo perdió la Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia, donde desde hace cuatro años no gana a pesar de jugar como local. También intentó lograr las alcaldías de Bogotá y Cali pero no pudo, y quiso hacerse con las gobernaciones de las uribistas Córdoba y Sucre, así como las de La Guajira, Santander, Caldas y Meta, pero solo ganaron Casanare, Vaupés y Bolívar, pero en este último con una coalición de media docena de partidos.
Sin embargo, la senadora Paloma Valencia reivindicó algunas victorias del partido de gobierno: '¡Uribistas ánimo! crecimos mucho en estas elecciones, pasamos de 57 alcaldías a 120, de 1 gobernación a 4. Un partido de opinión, sin maquinarias, sin puestos, sin presiones doblamos nuestras votaciones en lo regional'.
El petrismo ganó algunas plazas, pero en coalición: Villavicencio, Cali, Buenaventura, Guapi (Cauca), Turbaco (Bolívar), Villavicencio, Teorama (Norte de Santander), Codazzi (Cesar) y Santa Marta, así como la gobernación del Magdalena. Perdió Bogotá, que solía ser su fortín, Sucre y Nariño, que venía eligiendo gobiernos alternativos.
'Ganamos en Guapí, Buenaventura, Cali, Teorama, Codazzi, Villavicencio,Turbaco, Magdalena, Santa Marta, bancada femenina en Bogotá, segundos con derecho a diputación en Atlántico, Putumayo, apoyo en gobernación victoriosa de Huila', escribió el senador orense, quien agregó sobre su hijo en Atlántico: 'Nicolás Petro hizo la campaña que tocaba. Atlántico prefirió quedar bajo la égida de los Char y catapultarlos como los rivales de la Colombia Humana en el inmediato futuro. A Nicolás le queda la enorme tarea de liderar la Colombia Humana en todo el Caribe'.
