'Dificultad electoral', fiasco, 'confusión', 'molestia', 'fraude' son algunas de las palabras que se usaron ayer para describir la falta de tarjetas electorales para las consultas interpartidistas populares. Sin lugar a dudas, este lunar logístico de la Registraduría Nacional del Estado Civil, fue el protagonista de las elecciones del domingo en las que La gran consulta por Colombia, de la derecha; y la Consulta inclusión social por la paz, de la izquierda, fueron las afectadas.
Primeros reportes
En la mañana y desde orillas políticas distantes se empezaron a conocer las primeras denuncias en las cuentas de Twitter del expresidente Álvaro Uribe Vélez y Gustavo Petro, sobre la falta de tarjetas electorales.
Minutos después el Registrador Nacional del Estado Civil, Juan Carlos Galindo, reaccionó y salió a dar declaraciones admitiendo el problema y dando a conocer el ‘plan b’ de la entidad: sacarle fotocopias a los tarjetones.
'Se han presentado problemas con las tarjetas de consultas, en algunos lugares se agotaron. A pesar de que imprimimos 30 millones de tarjetas para las consultas interpartidistas, 15 para unas y 15 para otras, en algunos puestos de votación, particularmente Medellín, Montería, Cúcuta y Manizales, ha habido dificultades con esas tarjetas; sin embargo, con el acuerdo que tuvimos con los partidos y movimientos políticos al momento de organizarlas, y dada la restricción de presupuesto, autorizaron ellos que procediéramos con fotocopias', le dijo a los medios presentes el registrador Galindo.
Pero la tormenta había empezado y no daba señas de amainar.
Por ejemplo, el candidato Gustavo Petro criticó la improvisación del Gobierno de Juan Manuel Santos, y sin adornos calificó la actuación de 'fraude'.
'Con fotocopias y con datos mandados por teléfono sin rastro digital. Esa es la Registraduría de Colombia. Santos se inclinó por el fraude y la falta de transparencia electoral', escribió Petro.
Por su parte el Centro democrático trinó: 'Exigimos a la Registraduría garantías en esta jornada electoral. Se debe garantizar la participación de la ciudadanía en La gran consulta por colombia. No es posible que se acaben los tarjetones o que jurados no los quieran entregar. Registraduría debe solucionar esto inmediatamente'.
Después, Uribe le pidió a sus electores que no se retiraran de los puestos de votación hasta que llegaran las fotocopias de los tarjetones que anunció el registrador Galindo.
En varios puestos de votación en Colombia la inconformidad fue in crescendo y la furia de los electores cada vez fue más notoria.
Más reacciones
El Fiscal General de la Nación, Néstor Humberto Martínez, se pronunció desde Bogotá sobre las denuncias de falta de tarjetas.
'La unidad electoral abrió investigación con objeto de generar alguna conducta desde el punto de vista penal', dijo Martínez a medios de comunicación.
Por otro lado la Misión de Observación Electoral (MOE), expresó en un comunicado que desde las 11 y 45 de la mañana empezaron a recibir denuncias del tema. También le recordó a la Registraduría que durante las Comisiones de Seguimiento Electoral recomendó que la distribución de los tarjetones para las contiendas interpartidistas se hicieran en consultas con los partidos y movimientos participantes, para evitar lo que ayer sucedió.
'Se ha tenido noticia de que se agotaron los tarjetones en puestos de votación de ciudades como Medellín, Bogotá, Barranquilla, Bucaramanga, Santa Marta, Cali, Sincelejo, Montería, Zipaquirá, Cúcuta, Manizales, Envigado. También en puestos en el extranjero en ciudades de Estados Unidos como Miami y Atlanta', informó la MOE en un cominicado.
El mea culpa
Juan Carlos Galindo admitió anoche que la ausencia de tarjetas, que precisó fueron 'en 26 mesas en el país', afectó el proceso electoral. Insistió que los partidos sabían del mecanismo de emergencia de acudir a fotocopias o tarjetones de otras mesas.
Sobre el cuestionamiento de los partidos políticos, Galindo agregó que estos nunca definieron una matriz de distribución de los tarjetones para evitar que faltaran en una región del país o en otra. 'Históricamente tampoco tenemos esa información. A modo propio no podíamos distribuir por zonas y cantidades. Lo hicimos equitativamente con 50% para una y otro 50% a otra. Se hizo proporcionalmente'.
Al final, las dos consultas lograron juntas 9.294.871 votos.